el cambio del cielo

soy...

-los conozco a todos, por que aun que no lo crean yo soy ella y ella es yo-
Esas palabras confundieron a toda la decima generacion vongola, ningun sonido era emitido por nadie...hasta que un adulto que vestia de traje con un sombrero y patillas extrañas aparecio desde detras del sillón en el cual estaba sentado train
-tienes alguna prueba de eso train...si es que ese es tu verdadero nombre- el adulto dijo mirando fijamente al castaño y este lo miro como si no fuera mas que una cucaracha y le quito el sombrero para ponérselo el
-me tienes reborn, mi verdadero nombre es sawada tsunayoshi, decimo vongola, neo vongola primo- con esa presentacion tsuna encendió sus llamas del cielo, algo sorprendido ya que no tenia ninguna pastilla de la ultima voluntad.
Unos guantes metalicos muy parecidos a los del vongola primo aparecieron y sus ojos ahora eran de un color naranja

Nuevamenre el silencio reino en la casa, nadie emitia una palabra ya que estaban muy sorprendidos por la repentina informacion.
-asi que...que haces aqui tsunayoshi sawada- la pregunta...que en realidad era mas una afirmacion llego mukuro rokudo, como entro a la casa, nadie sabe
-por una traición de mis guardianes- por unos momentos mukuro miro fijamente a tsuna que este tambien lo miraba, de repente tsuna uso el respaldo del sillon para levantarse a la ves que mukuro trataba de atravesarlo con su tridente, sin perder un momento, tsuna le dio una patada que bloqueo por poco, lo que no se esperaba es que con agilidad digna de un gato usara el impulso generado por la primer patada para lansar una segunda que le dio en el mentón, la patada lo mando a estrellarse contra la pared detras de el, cuando mukuro se estaba levantando, tsuna apareció frente a el y le dio un puñetazo que le rompió la nariz
-puede que no seas mi guardian mukuro, pero tengo resentimiento contra ti y todos en esta sala- la voz de tsuna sonaba tranquila, pero el aura que emitía era la de alguien que ya habia matado y lo hacia sin remordimientos, curiosamente a reborn se imagino a un gato negro
-ahora, donde guardaron mi revolver- la voz del decimo vongola llego como un comando
-carnívoro- la voz de hibari ganó la atención de todos que lo miraron fijo
-no te devolveremos eso hasta que muestres que podemos confiar en ti-
Tsuna lo miró molesto antes de caminar hacia la puerta y salir, no sin antes darle un golpe en el estomago a hibari que lo dejo sin aliento.

Un par de horas mas tarde

En el borde de un tejado podemos ver a tsuna sentado, mirando a la nada, se encontraba sumido en sus pensamientos, que no se dio cuenta que no estaba solo hasta que alguien se sentó a su lado, ese alguien no era nadie mas que tsunayashi sawada

(Imaginen a tsunayashi y ya)

-aqui estabas tsuna, me tenias preocupada-  la castaña le dijo, su tono se notaba que estaba algo relajada, el castaño la miró de reojo en una silenciosa pregunta que la castaña entendió a la perfección
-es que ya pasaste por mucho y me preocupe en cuanto te fuiste de repente- el castaño en ves de responder volvio a mirar a la nada.
El silencio incomo duro unos minutos hasta que el castaño sintió un peso en su regazo, al mirar vio su revolver y luego volteo a ver a la castaña
-parece importante para ti asi que...te lo devuelvo- tsuna estaba francamente sorprendido aun que no lo demostró, el tomo el revolver y luego cuando estaba por darle las gracias la pego a el con un brazo y se dejo caer del techo justo cuando un agujero de bala apareció donde estaba la castaña antes.
Mientras caian, tsuna miro hacia la izquierda y apunto alli para luego disparar, no muy lejos, de un árbol cayó una persona con un agujero en el ojo izquierdo y un rifle m24 silenciado cayó junto a el, antes de tocar el piso, tsuna se dio vuelta cayendo de pie como un gato, la castaña miro al cuerpo con algo de miedo, en cuanto este la solto ella salió corriendo, el castaño solo se encogió de hombros y caminó hacia el cadáver, cuando paso por ensima de el solo murmuro algo
-he venido a traer un poco de mala suerte-
Luego de eso desaparecio en la oscuridad del bosque