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Hola antes de empezar quiero disculparme por no actualizar en tanto tiempo se que me quieren matar y todas esas cosas pero... En realidad no tengo ninguna excusa bueno dicho esto los dejo con el nuevo capítulo.

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Ésa noche llege a mi casa y me lance a mi cama a llorar por haber recordado lo que le sucedió a mi madre. Lloré por horas recordando los momentos que vivimos los dos juntos y en un momento grite llorando, !madre por que te fuiste por que me dejaste solo que no ves que te necesito!....

A la mañana siguiente

Me desperté con los ojos inchados y la cara pegajosa salte de mi cama y me empecé a alistar para irme a mi colegio una ves que termine salí corriendo dirigido a mi colegio una vez que llegue a mi colegio lo primero que me pregunta el portero fue ¿por que tenía los ojos inchados?. Dado al parecer que me olvide lavarme bien la cara para que no se vieran haci.

Por nada le respondi eludiendolo para llegar a entrar al colegio una vez adentro corrí a los baños para ver qué hacía con el aspecto que tenía meti mi cara en el lavamanos y me talle los ojos para ver si haci me arreglaba mi aspecto.-bueno no mucho el cambio pero ayuda en algo después de decir esto corrí a mi salón resando para que el profesor no haiga llegado aún a mi nombre....

!¿Bites?!.-grita el profesor.

Presente!!.- grite entrando al salón agitado por haber estado corriendo.

Bonitas horas de legar bites... Y con esas fachas también.- dice el profesor con indiferencia.

Fachas?.- pregunto desconcertado.

Empiezo a verme y me doy cuenta de que estoy hecho un desmadre la camisa la mitad metida debajo del pantalón y la otra mitad afuera, la corbata mal puesta, los botones del saco mal puestos y traía puesto los zapatos de educación física.

Perdon.- le dije al profesor con la cabeza agachada y mirando al suelo de la vergüenza.

Vaya a arreglarse al baño y regresa rápido, pero que sea la última vez.- sentencia.

Ok.- respondo avergonzado.

Salgo del salón de clases y me dirijo a los baños para arreglar mis ropas, mientras me arreglo empiezo a pensar en lo que había pasado ayer y empiezo a recordar a mi madre...

Hay madre como te extraño.- digo triste y viendo al suelo.

~•~•~•~•~• mas tardé ~•~•~•~•~

Bueno hora de ir a ver leer a Camila en el árbol.

Bueno ya llegó como todos los días.

Espera ya le hablé no?, ella ya me habló no?, ya salimos de paseo no? Porque no solo me hacerco para conversar.- " no parecerá raro?, y si ella quiere estar sola?, Y si ya no se acuerda de ti?. Me dice mi conciencia.

!Hey Cris ven acá no te quedes hay observandome!.- me grita Camila desde el árbol.

Espera que?, Se dió cuenta de que estoy aquí como? Cuan...

Vas a venir o yo voy a por ti grita interrumpiendo mis pensamientos.

Si ya voy.- le respondo en eso como nuca en todo el tiempo que he venido a observar a Camila me tropiezo con una de las cajas y me doy de cara al suelo...

Camila al ver mi caída corre hacia donde me encuentro para ayudarme.

Estas bien?.- pregunta mientras me levanta del suelo.

Si.- respondí a su pregunta.

Qué pasó, cómo te caiste?.- pregunta intrigada.

Ni yo lo sé.- le respondo con una pequeña sonrisa.

Ella solo muestra una pequeña sonrisa .

Oye ya hemos pasado algo de tiempo juntos no tienes que todavía seguir viniendo aquí a verme con Leo a la distancia solo acercate y háblame, yo no muerdo.- me dice con un tono feliz y con una gran sonrisa.

Jeje... Ok.- le respondo agarrando mi cabeza por el dolor que aún sentía de la caída.

Y bueno dime porque sigues viendome desde aquí?.

Lo único que hago como respuesta es agachar la cabeza para que no vea mi cara roja de la vergüenza.

Mmm... que hacen aquí solos los dos.- nos interumpe una voz de una chica con un tono algo pervertido.

La Vida De Un PubertoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora