Reencuentro

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¿Desde cuándo mi vida se volvió tan repetitiva? Toda la semana es despertar, arreglarme, ir al trabajo, tener media hora para comer y finalmente volver a casa a matar el tiempo que quedé del día, a excepción del domingo claro, esos días me mato del aburrimiento debido a que estoy sola, si tengo ganas voy por una cerveza con Inara, una amiga del trabajo que ayuda a lamentar mi vida aburrida; y sino, me quedo en casa escuchando a mi madre reclamándome por todo lo que debería estar haciendo, reclamándome por mis deseos de la infancia, como ya estar en un departamento yo sola a los 20, viajar por todo el mundo, seguir en la universidad... si

 —Yo pequeña... te aseguro que no es tan fácil como lo decías.

Bajé las escaleras hasta llegar a la cocina y desayunar por mi cuanta, ahí me encontré a mi madre.

—Tendré que empezar a cobrarte por cada mes que vivas aquí. —decía mientras lavaba los trastes en el fregadero.

—No te preocupes, madre, estoy buscando casa, así ya no tendrás a quién gritarle... espera, todavía tienes a tus animales. —a mi mamá le fascinaban los animales domésticos y atenderlos, por esa razón, desde que tengo memoria he tenido perros, gatos, peses, pájaros e incluso tortugas y una lagartija.

—Perfecto ¿cuándo dices que llega la mudanza?

—Wow! Tranquila, te dije que estoy buscando, no te  adelantes ¿si? —si no tuviera el respeto de la chanca voladora, hubiera maldecido.

- Pues ya te tardaste. —Respondió agria.

-Cómo sea... —suspiré 

Tomé mi taza de café y volví a mi cuarto.  Al estar ahí puse un poco de música de uno de mis grupos favoritos "30 Seconds To Mars".  Tomé asiento en la silla de mi escritorio y saqué mi teléfono en busca de algo que me distrajera. Entre a Facebook y topé con una notificación sobre el cumpleaños de mi vieja amiga, Ally. Su cumpleaños sería este mes; hace mucho que no la veo, medio año para ser exactos, la extrañaba, quería saber cómo estaban las cosas con ella pues la última vez que la había visto no parecía muy animada, había peleado con su familia, otra vez. Me lastimaba saber que no podía ayudarla a mejorar su situación, no después de que ella se alejara.
Salí de la aplicación, busqué el botón de contactos y  finalmente busqué su nombre. La llamé; después del tercer beep contestó.

—¿Bueno? —sonaba deprimida.

—Hola, Ally! —mi emoción se hizo evidente, hace mucho que no escuchaba su voz.

—Hola.

—¿Cómo estas? Solo llamaba para ver si tenías tiempo para un café, hace mucho que no nos vemos... y ... te extraño.

—De hecho estaba apunto de irme al aeropuerto. —se escuchaba al borde del llanto y no pude evitar preocuparme.

—¿Porqué? ¿ Recogerás a alguien?

—No, me voy yo... —me espanté al escucharla tan seca.

—¿QUE?¿A DÓNDE?¿CON QUIÉN? —me exalté.

—Porque ya no soporto esto, siempre es lo mismo y no puedo permitir que Molly viva así.. no como yo... —rompió en un llanto silencioso.

Tenía razón, yo sabía que su vida iba de mal en peor, desde que la conozco todo es así. No la podía dejar sola, y menos tan vulnerable pues con tal de salir de ese lugar haría lo que fuera.

—Entonces que sean dos boletos, voy contigo, llego en cinco minutos. —colgué.

Su casa no está tan lejos de la de mi madre, así que sin pensarlo tomé una de las maletas de mi padre de cuando vivía aquí y guarde lo esencial y la mayoría de mi ropa; tomé mi cartera y mi pasaporte junto con unos lentes de sol, tomé la tarjeta de crédito de mi padre, me la dio cuando se separó de mi madre y me dijo que únicamente era para emergencias, estaba a mi nombre y jamás la había ocupado por miedo a usarla mal.... <<¿Pagar un viaje con eso? Bueno, lo devolveré en cuanto pueda>>la guarde y salí de mi cuarto hacia la sala mientras llamaba un taxi.

—¿Qué estás haciendo? —salió mi madre de la cocina con un semblante confundido.

—No voy a poder llegar a la cena. —me puse los lentes y confirmé que el taxi ya estuviera afuera para escapar rápidamente. Sin escuchar a lo que mi madre me gritaba corrí con las maletas, finalmente entré en él. 

—adiós  mamá~ —dije por la ventana mientras ella se veía confundida << pf... la llamaré cuándo esté a una distancia muy generosa>> Indiqué al chófer la dirección hasta que empecé a analizar lo que había echo... Espero sea una buena idea.

Cuando estábamos juntas en la secundaria le juré que jamás la dejaría sola... y hoy no sería la excepción.

~Dispuesta a todo~/Imagina BTS _EN EDICIÓN _Donde viven las historias. Descúbrelo ahora