-Vamos, deja de pensar y entra al navegador, hablas con algún muchacho bonito y ya- esas fueron las palabras de mi mejor amiga Emily. ¿De qué hablaba? De una "aplicación o pagina llamada Omegle".
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Estoy en mi habitación luchando conmigo mismo por abrir o no la bendita aplicación. Luego de varios minutos decido hacerlo, solo por curiosidad. Aparece mi rostro abajo, una imagen en negro arriba y a un lado de mi imágen la palabra "siguiente chat", okay ¿Que tan difícil o cuantas consecuencias puede traer esto?.
A medida que pasa el tiempo solo aparecieron hombres y mujeres pervertidos, y alguna que otra persona que quería solamente dialogar. Decidí que la persona que siquiera sería la ultima.
-Ojala no sea un pervertido- dije para mi mismo
Pongo "siguiente" y solo veía un fondo negro hasta que boom aparece un muchacho demasiado atractivo para ser real.
-Hola- dije con una sonrisa en mi rostro
-Hola, ¿Que tal? ¿Cómo es tu nombre?
-Genial, ¿Tú?. Oh, mi nombre es Chan ¿El tuyo?- ¿Por qué no podía para de sonreir? Y demonios- él solo estaba serio
-Feeldog- dije como sin importancia
-¿Disculpa? ¿Ese acaso es un nombre?- estaba realmente confundido
-No, no lo es- dijo sin darle importancia
- Entonces dime tu nombre- realmente queria saber su nombre
-Oye niño bonito, es mejor no saberlo. Debo dormir ¿Me das tu número? A lo mejor podemos seguir en contacto- ¿acaba de decirme niño bonito?
Luego de eso le di mi número de telefono y me acosté, después de todo Emily no tuvo una mala idea.
~Hey, perdonen los errores que puedan haber.