Capitulo II

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Estamos muy felices ya que en pocas horas llega mi padre de su viaje a Australia. Sí, sé que no les había hablado de mi padre, pero es que casi nunca se encuentra aquí en casa.

Pero creo que llego el momento de hablares un poco sobre Alex Russo: Hijo menor de una familia adinerada al norte de Italia, nació allá pero en su adolescencia decidió alzar vuelo y salir de las alitas de sus padres, para así construir su futuro poco a poco y por sus propios méritos.

 Así es como la historia de mis padres comenzó, se conocieron en la universidad, mi madre no soportaba el acentico de papá, pero poco a poco éste se fue ganado el corazón de mamá.

Sí, mi padre es el ser más meloso, detallista y romántico que conozco.

Se graduaron juntos, fue la mejor generación que había pasado por esa universidad. Mi mamá una abogada muy exitosa, mi padre por el contrario, no quiso perder la costumbre de su familia así que se convirtió en un gran empresario, dueño casi todas las franquicias de comida rápida (no, no sólo pizza) de la ciudad y unas pocos a las afueras de la misma.

Sé que pensaran que al tener una empresa tan grande en la ciudad, debería estar todo el tiempo al pendiente de esta, pero no, mi progenitor lo menos que hace es pisar esa empresa.

Hace algunos años la dejó a cargo de su mejor amigo Rick, quien decidió dejar su vida en Estados Unidos para dedicarse completamente a su trabajo.

Papá se la pasa casi que todo el año viajando por todo el mundo en busca de nuevas aventuras, o como dice el "Aventuras nuevas esperan por mí, en cada parte de este planeta". Mamá al principio no estaba muy de acuerdo con que pasara mucho tiempo fuera de casa, pero el señor Alex, muy terco por cierto, la convenció y aseguró que todo estaría bien.Yo decidí apoyarlo, aunque en el fondo no lo quería tener lejos.

Es así como Sophia aprendió a ser madre soltera y lidiar con una adolescente que le molesta la más mínima cosa de este jodido mundo.

-¡Cariño, ven ayúdame con el pastel!

-Voy má-le respondo pegando un grito desde el sofá. Si, sé que no debería estar aquí sentada mientras mamá está preparando todo, pero antes de que digan que soy mala hija, déjenme decirles que estaba enviándole un mensaje a Samy para saber si vendría a cenar con nosotros.

Entro a la cocina y mi madre usa ese delantal floreado que papá le trajo hace ya unos dos años de su viaje a México. Está preparando unos manjares, desde el pavo que aún se encuentra en el horno, hasta unos simples canapés, pero que lucen tan elaborados y profesionales. Mamá es la mejor en la cocina. Ojalá papá no me escuche decir esto, porque me deshereda.

-Eli, sé que soy muy bella, ¿pero no crees que deberías estar ayudándome con el pastel en vez de quedarte allí viéndome?- dice ella sacudiendo sus manos muy cerca de mi nariz

Cuando salgo de mis pensamientos la noto con una sonrisa burlona.

-Después preguntas a quien salí con ese autoestima tan alto, no?- le digo mientras me coloco un delantal de color morado. Ella solo se rompe a carcajadas y me pica el ojo como respuesta.

Luego de unos 15 minutos que me llevó preparar la mezcla de chocolate, estoy metiendo el pastel aun crudo al horno para que empiece su cocción. Desde muy pequeña me llamó la atención la repostería, por lo que mi mamá dijo que sería muy buena idea de que hiciera algunos cursos, es así como desde ese momento me he encargado de los postres en esta casa. Si, ya se, van a decir que para preparar un simple pastel de chocolate no se necesita tener mucha experiencia, y sé que tienen toda la razón. Pero es el favorito de papá así que es tradición hacerlo.

Mamá ya terminó con sus labores aquí en la cocina por lo que ahora está arreglando la mesa, así que voy a ayudarla.

Termino de colocar las copas y cubiertos en la mesa, cuando escucho el celular de mamá sonar, ella sale corriendo y atiende, la observo mientras que ella asiente a lo que le dicen del otro lado de la línea, termina la llamada y da un gran suspiro.

-Má, quien...

-Amor era tu padre -no me deja terminar de hablar-, ya se encuentra en el aeropuerto.

¡¿Queeeee?!

Es cuestión de media hora, para tener al príncipe azul de mi vida delante de mis ojos.

Oh mi Dios, no se porque estoy tan nerviosa.

¿Será porque tienes ya 2 meses que no lo ves?

Si, puede ser.

-Mami, voy a arreglarme- le digo mientras me dirijo a las escaleras que llevan a mi habitación.

-Esta bien cariño...Por cierto, espero te guste el regalito que está en tu cama. Feliz Navidad Elianna- me dice y me pica un ojo. No sé porque pero esto me huele mal, mamá se trae algo.


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Bebeshoooos

Capitulo nuevoo!!! He de confesar que me gusto mucho escribir este capitulo.

¿ Cual será ese regalito que le espera a Eli en su habitación?  

Espero les haya gustado, me gustaría mucho que comenten como les ha parecido la historia hasta ahora.

Nos vemos prontico


¿Quien carajos eres tú?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora