✿ Capítulo 24 ✿

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Han pasado unas semanas desde la vez que SeHun y LuHan hicieron el amor. Ahora se la han pasado haciéndolo con brusquedad.

LuHan ha vuelto a trabajar, y había conseguido varios acensos que le permitían llevar a su híbrido al trabajo. Así la pareja era inseparable.
Sin embargo, al pasar tanto tiempo juntos, LuHan se dio cuenta de algo raro en su pequeño​... Tenía bastantes cambios de humor, comía mucho y por lo visto estaba con una grasita de más. Pero eso no impedía que se amaran con todo su ser.

—¿Qué estás haciendo amor?— Preguntó su amo dejando de lado sus papeles importantes para mirar a su precioso novio.

En la oficina de LuHan, estaba su escritorio grande, como el de todo gerente general, y al lado estaba un escritorio más pequeño y de color rosa para SeHun, donde hacía su trabajo que era dibujar, jugar con plastilina, con legos o a las muñecas.

—¡Te estoy dibujando mientras trabajas amo! Siga trabajando! — Ordenó Hunnie mientras escogía una crayola roja para pintar los labios de su pareja.

—Ah, perdón bebé. — Su amo soltó una leve risa y siguió con su papeleo mientras escribía algunas cosas en su laptop. SeHun no sabía nada de eso pues todavía se le dificultaba leer y no entendía el significado de algunas palabras.

Pasaron unas horas y LuHan terminó todo su trabajo de hoy, por lo que decidió salir temprano y llevar a comer a su lindo híbrido.

Primeramente fueron a casa para ponerse ropa más cómoda y digna para la playa, después de aquello, se subieron nuevamente al automóvil y fueron para un restaurante de comida de mar, comida que Hunnie amaba.

El mesero llegó y le entregó menú sólo a LuHan ya que SeHun era pequeñito y parecía un niño, aunque lo era.

—¿Amo por qué no tengo meyú?— Habló Hunnie, sentándose sobre las piernas de su novio ya que la mesa que pidieron era de dos y el pequeño no quería estar parado para ver el menú.

— Porque eres mi bebé pequeño. — Su amo dejó que su pequeño también mirara el menú, encontrando una sección para pequeños.

—¡Mira amo! Yo quiero, quiero, papas frit-tas con camarón-es envuelos de tocino! Y una esalada de penpino! — Dijo Hunnie, orgulloso de su lectura.

—Está bien amor, y te pediré limonada ¿si?— Hunnie asintió mientras que su amo llamaba al mesero y les daba su orden.

Comieron, y Hunnie aún quería más, por lo que LuHan le pidió un postre que era un volcán de chocolate junto a una bola de helado de vainilla y algunos trozos de fresas.

Después se fueron a dar un paseo en la playa, como era de tarde, el sol estaba siendo comido por el mar, según el pequeño Hunnie. Por lo que no había sol que les quemara la piel.

—¿Amo podemos vamos por un helado? — Comentó Hunnie a la vez que sonreía con ternura, sonrisa que mataba a LuHan por dentro y le era imposible decirle que no a su bebé.

—Pero si ya comiste mucho dulce bebé, luego te pondrás loquito. — LuHan debía de dejar de mirar a su pequeño para no caer en la tentación de decirle que sí, pero su rostro era tan hermoso que no pudo contra él. —Bueno, está bien, vamos amor. — Una pequeña risa salió de sus labios y se encaminaron a una heladería cerca.

Durante el camino hacia casa, SeHun comenzó a sentir mareos, cosa muy rara en él ya que siempre estaba bien de salud.

—Duerme ¿si? Todavía falta para llegar. — Su amo le dio unas caricias a la cabeza de su pequeño dándole también a sus orejitas.

Hunnie asintió y no tardó en quedar dormido.

Unos largos minutos después llegaron a casa, dónde LuHan cargó a su pequeño y lo recostó en el sofá, para poder servirle comida a sus gatos y darles un poco de atención.

parque de híbridos。hanhun ꕤDonde viven las historias. Descúbrelo ahora