Cambiantes.

Nueve; Clara

El sonido fue insoportable, tape mis oídos y rogué por no caer al suelo o que Jordi cayera pero el disparo fue disparado al aire.

-Debieron de haber visto su cara de miedo – Comenzó a reírse divertida y guardo el arma.

-Jordi, tienes que entender, bueno ni siquiera entender. Sabes como es este trabajo, puedo dejarla ir pero tu tienes que ir conmigo bajo las condiciones que ya sabes.

-No quiero estar más en eso, Clara, no diré absolutamente nada

-Se que no lo harás pero esto no queda en mi

-Puedes decir que me mataste

-Quieren ver el cuerpo y el de ella, que la verdad no me molestaría llevarlo

-Clara, basta, déjame ir, se que idearas algo, tienes el suficiente poder en cambiantes como para que pueda irme.

-Lo tengo, eso es cierto pero va a ser muy difícil

-Si hubiera sido al revés, no hubiera dudado ni un segundo en hacerlo

-Pero nadie lo hizo

-Entonces ahora tu hazlo por mi, por él

-Eso es un golpe bajo, incluso para ti

-¿Lo harás?

-Lo haré, pero no te quiero volver a ver en México, quiero que cambies de apellidos, quiero que ambos desaparezcan, no más comunicación con nadie de allá

-Pero... - Me interrumpió Clara, pero tenia una vida en México que no podía dejar así como así.

-Yo me encargo de tus cosas allá, tu familia sabrá donde estás y cuando Jordi te diga podrás contactarte

-¿Cómo puedo confiar en ti?

-Farah, cariño... no tienes más opciones que hacerlo.

-Va a estar bien, lo prometo, Farah – Jordi me volteo a ver y asentí, no era como que tuviera más opciones.

-Entonces harán lo siguiente, aquí ya se creo un caos, lo cual nos ayuda, diré que los mate a ambos y que queme todo el lugar, confían en mi, así que no me pedirán pruebas pero como dije tendrán que irse y si es a algún lugar fuera de américa, esta mejor.

-No tenemos tanto dinero, Jordi – Dije casi a su oído

-Oh vamos ¿Eres tan tonta? – El tono de Clara me hizo enojar

-Lo tengo, Farah, para eso y más- Jordi me regalo una sonrisa de confianza y me encogí de hombros.

-Después de eso yo me comunicaré con ustedes para decirles si ya están fuera de peligro y para que Clara se comunique con su familia.

-¿Qué va a pasar con los de la empresa? –Esta vez me dirigí a Clara

-Evidentemente se van a enterar de que murió y se va a olvidar todo el asunto

-Perfecto, dame el celular – Jordi estiro la mano después de hablar y Clara le entrego su teléfono, el le quito un chip que venia pegado en la batería que parecía ser un GPS.

-Ahora váyanse, yo me encargo de esto, puede ser de mis hobbies favoritos

-¿Matar gente? – Dije antes de que Jordi me tomará de la mano para que saliéramos del hotel mientras Clara me guiñaba el ojo sin responder nada.