Tranquilidad temporaria

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Mi madre me recogio de la escuela y me trato con mucho cariño. Me preguntaba como fue mi día, si me había ido bien pero yo no le contestaba, estaba desesperado para llegar a casa y terminar con mi dichosa vida. Ya no aguantaba más con esta pesadilla que vivia todos los dias. Decidí quedarme dormido, distraer mi mente de todos los insultos y burlas que me hicieron mis companeros de clase. Fue la paz ante la tormenta. Entonces senti un fuerte impacto en el carro. Todo estaba dando vueltas, lo que conocía como el suelo siendo el cielo. Los gritos de mi madre se fueron disminuyendo con cada vuelta, quede inconsiente. Pense que finalmente tendría lo que tanto deseaba, acabar con mi vida y descansar en paz. Eso es lo que deseaba con toda mi alma. Pero desperté. Desperté y no recordaba nada en absoluto. Al fin podia estar tranquilo...

JOSEPHDonde viven las historias. Descúbrelo ahora