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El sol comenzó a quemar más que nunca ese día y tú, mirando a todos que esperaban que mencionaras alguna palabra, comenzaste a armar los grupos con total convicción.

Katherine —comienzas a decir —. Tú te quedarás aquí para darle cuidado a los que están enfermos.

—Totalmente de acuerdo —confirmó Katherine.

—Nícolas, tú te quedarás con ella aquí, conoces mejor el lugar y uno de nosotros tiene que quedarse —acotó Annie.

Nícolas no mencionó palabra alguna, solo movió su cabeza en señal de aceptación.

—Yo voy con ustedes —intervino Emma —. Quiero ver con mis propios ojos los misterios que esconde esta maldita isla y saber quién nos metió acá.

—Perfecto —respondes y te diriges a Patrick y Andrew —. Solo quedan ustedes muchachos, ¿Y entonces?

—Pienso que las chicas necesitarán de alguien más que este con ellas en caso pase algo así que me quedo —decide Patrick.

—¿Miedo Patrick? —bromea Dereck.

—Precavido —sonríe en respuesta.

—Y tú Andrew, ¿Vienes con nosotros? —terminas preguntándole.

Andrew se hizo el desentendido y solo atinó a decir:

—Me da igual, vamos.

—Correcto, los grupos ya están divididos. Preparen todo lo que necesitaremos para irnos de inmediato —ordenas.

Katherine toma el maletín donde se hallan las medicinas y comienza a registrar entre los medicamentos que hay en el interior de este.

—Nícolas —dice entregándole tres recipientes con medicamentos —. Con esto bastará, guárdalos.

Nícolas cogió los medicamentos y se dispuso a hacer lo que le dijo.

Hey, Dereck —grita Katherine —. Sería bueno que se lleven esto —y le lanza el maletín con medicinas —. Tal vez lo necesiten.

—Gracias —sonríe y le guiña el ojo.

Annie cambia la piedra que estaba en su lanza por una más grande y más filosa. Dereck, por su parte, se amarra la daga que poseé al costado del pie derecho y tú revisas las balas de tu arma, le das vuelta al tambor de esta y de un solo movimiento la regresas a su lugar, cargas la pistola y la guardas en tu cintura.

¿Listos? —preguntas.

—¡Si capitán, estamos listos!

Todos se miran entre sí y comienzan a reírse.

—¡Qué niño que eres Patrick! —le responde Emma.

—Solo quería alivianar la tensión muchacha—bromea.

—Bien —toma la palabra Annie mostrando un rostro más serio —. Ya estamos listos, es hora. Nícolas ya sabes que hacer si llega a pasar algo peligroso o fuera de lo normal —dice dirigiéndose a él.

—Lo sé perfectamente—confirma

Patrick, te encargo a Katherine eh, cuídala—termina diciendo Dereck —. Nosotros volveremos lo más rápido posible con noticias para largarnos de aquí.

—No se preocupen —responde —. Cuídense mucho.

Y el grupo de expedición comenzó a alejarse del lugar lentamente.

Comencemos.
Ir al capítulo 33.

SOS ¿Vivir o Morir? ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora