Nota 1

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Nunca llegue a saber por completo cómo empezar una nota,

Pero cuando empiezo las palabras fluyen solas,

Como las pequeñas olas que forma el mar,

como cuando el fuego consume un papel de hace años con la brisa de invierno

Y para serles sincera van tan veloz, tan veloz,

Que casi no me dan tiempo para pensarlas ni ver su pasar.

Y ahí van,

Van creando mi realidad,

A veces hasta bailan con coraje y emoción,

¿Cómo no tendrán emoción si aman ser escritas?

Aunque existe un verdadero porque de aquel baile con fervor que de hecho,

Hasta a mi me logra llenar un poquito el corazón.


Nunca digo los motivos de estar escribiendo en el lento insomnio de las madrugadas,

Aquí entre nos... esta situación no me es para nada incorrecta,

Es que, ¿Como no estar despierta con el hermoso ambiente que da la noche?,

El día es hermoso,  llena de esplendor nuestras almas,

Pero la noche es un viaje perfecto hacia el onírico, lugar donde descansan estas danzantes letras.

En aquel viaje muchas cosas vienen a mi cabeza,

Pienso tanto y nada que las horas se me van,

No despierto hasta tarde y el día se enoja conmigo,

Como castigo sus rayos de luz no me alumbran,

Su calor no vuelve a cobijarme más,

Termino con un horrible frió,

Volando a ciegas en la oscuridad,

Pero no se preocupen que esto es solo una mala costumbre nomas,

Ya pronto mis ojos podrán ver bien entre sombras, sin claridad.

Aspiro un poco de despreocupación,

Obtengo un poco de paz,

La suficiente para soltar mis cadenas y mandar a estas mismas letras a escribirse y bailar su canción,

Pero, la verdad de esta situación,

pese a todo lo que han redactado en estas líneas,

a pesar del sabotaje al corazón, 

el placebo y mi intento de razón

sigue siendo un problema que termina por degollar la emoción.


Ahora las emociones cambian y termina la introducción,

¿Qué sucedió con todo lo feliz de lo anterior (que técnicamente no era tan feliz como se pensó)?

Pues era en realidad una máscara hermosa,

Sin sonrisa y color carbón,

Olvidada por su portadora

Quien la dejo tirada en mi cama sin motivo ni razón.

No me quise deshacer de ella,

Pues llego en un silencio cálido junto con el suave saludo del alba.

Recuerdo que cuando la tome no hubo duda alguna en adherirse a mi corazón,

Porque en el ya no latía sangre y no podía seguir el compás,

Lo descuide tanto tiempo que término maltratado.

Aquel órgano latente quedo olvidado porque ya casi no había sentido en la verdad.

Esta mascara ahora ayuda a la vida que deje olvidada en un rincón,

esa vida que no quiso salir de ahí por los malos días que hubieron en sueños,

Ella me ayuda al menos a mantener ese secreto,

Y tiene ánimos de ayudarme a volver a sentir el viento,

Pues sabe que ya ni siquiera recuerdo el sabor del café,

Ya que estoy tan cansada de seguir aquí que no puedo ni siquiera hacerme un maldito café.

Es todo un proceso que nace y quema todo el lugar,

una llama congelada y fugaz,

Y deja en su pasar cenizas, sangre y sueños que jamás serán parte de la realidad,

Pero que créanme cuando les digo que no es tan malo,

Porque al final desahogan al personaje de estos sueños de mortal,

El cual al final envía una carta con la máscara a su dueña real.

Se espera de todo corazón que ella sepa que esta carta es totalmente suya y que siempre lo fue en realidad.

Que sepa que nunca nadie huyo y que por eso las ojeras marcadas están.




(Puta que escribo mal jskdnks)

Pociones sin efectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora