Drag Me Down (Yaoi/Gay)

Do you think this is a game?

Luego de que todos esos hombres de negocios se fueron, el comenzó a besar mi cuello, algunas veces detras de mi oreja también, y en susurros me regañaba de una forma bastante extraña.

-No debiste hacer ese sonido delante de ellos sabes? Hiciste mal al hacerlo... Deberias de disculparte no crees? -me susurraba al oído con la voz mas ronca de lo normal. Me estremecí.

Sus caricias continuaban y sin poder evitarlo mi cuerpo respondía a aquellas de forma positiva. Comenzó a levantar mi suéter negro junto a mi camiseta poniendo sus frías manos en mi piel, pero le detuve. Juré que mi rostro más rojo no podría estar.

-Y-yo... Tengo frío -susurré sosteniendo el borde del suéter aun con sus manos dentro- podría resfriarme...

Parecía sorprendido, pero solo siguió con las caricias sin levantar como mi ropa, sentí su mano bajar hasta la hebilla de mi pantalón y la desabrochaba para comenzar a bajarlo lentamente, para así poder acariciar mi miembro causándome soltar algunos gemidos debes en cuando junto con jadeos haciéndome estremecer con cada toque. Siguió dando placer a mi parte íntima hasta hacerme venir en su mano, dejando escapar un gemidos agudo deje caer mi cuerpo sobre su escritorio, ordenó mi ropa y acariciaba mi espalda.

-Esto es todo por hoy, no te haré nada que no quieras -su voz sonaba dulce o solo era mi imaginación?- quieres descansar? Pareces tener fiebre..

Fiebre? Que va imbécil -bufé para mis adentros.

-S-si estoy algo agotado-susurré desviando la vista.

Me acomodó en sus brazos y comenzó a acariciar mi cabello con cuidado como si fuera un cristal, era raro que hiciera eso después de golpearme como si fuera una roca irrompible. Me deje llevar por la calidez del momento y caí rendido en el sueño acumulado.

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(Viktor Lapkov)

Lo mire mientras dormía entre mis brazos, se veía bastante tierno y debes en cuando roncaba suavemente, acaricie su cabello y sonreí nostálgico.

-Por qué tienes que parecerte tanto a él? Me haces enamorar más cuando te veo dormir, hasta en eso te pareces...-susurré con tristeza viéndole dormir.

-Ahora que lo dices si se parece mucho a Yukio -dijo Erick desde la puerta, ese inolvidable momento en que conocí a Yukio.

Jamás pensé enamorarme nuevamente como lo hice de él.

{Flashback}

Me senté tranquilo en la banca del parque, hoy hacía un poco mas de sol que los otros días que llevó aqui. Bostezando con pereza me acomode en la banca viendo a la aburrida gente, muchos caminaban con prisa al trabajo, otros llevaban su típico uniforme negro. Pero lo vi a el, tropezar y caer con todas sus cosas al suelo, de inmediato me acerque a ayudarle, hubo un leve contacto con nuestras manos haciendo que una electricidad recorra mi cuerpo entero, cuando vi su mirada mis mejillas tuvieron un leve rubor.

-Estas bien? -le dije ayudándole a levantarse- mi nombre es Viktor Lapkov, puedo saber el tuyo?-extendí mi mano y la volvió a tomar.

-Y-yo soy Yukio, Katsumi Yukio -dijo sonriendo sonrojado corriendo la mirada - es un gusto..

Sentí mi corazón saltar dentro, comenzando a latir fuerte y sonreí alegre, creo que esto es amor a primera vista o así lo llaman,no?

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Hablamos durante horas sentados en aquel parque, le invite un café, pedí su número telefónico.

Estaba completamente enamorado de él, nos hicimos novios pues sentía lo mismo, teníamos 20 años ambos cuando comenzamos, luego de 3 años de relación nos enteramos de que tiene cáncer y otras enfermedades, el alma se me partió, cuando él murió, yo también lo hice, me hice empresario, comencé con tráfico de drogas, luego comencé a traficar a chicos de entre 15 y 20 años como esclavos exóticos en él extranjero, me volví una personas fría y cruel, hasta que a mis 37 años vi a un chico parecido a él, lo decidí tener como esclavo personal, pero mi plan fallo, y termine enamorado de aquel chico que se parecía tanto a el.

{Fin del flashback}

Continúe con algunas reuniones importantes mientras él dormía, todos preguntaban si es que acaso el era mercancía, pero lo negaba de inmediato, no quiero seguir haciéndole daño, puede marcharse si quiere, pero tengo un temor que no me permite confesarle aquello, sería arruinar mi reputación y mi orgullo, pero he estado pensando  que es mas importante, si mi reputación o su bienestar.

Le admire mientras dormía, se veia tan tierno y tranquilo, aveces suelen darme erecciones al imaginarmelo de formas en las que no debería pensar, es un niño aún. Intente despertarle pero de removió quejándose, volví a moverlo y comenzó a frotar sus ojos, abrió los ojos y mi miro sonrojándose de inmediato su estatura baja y delgadez gustaban, aunque preferiría que vistiera con mas colores, al parecer toda su topa es negra, hasta la interior.

—Debemos irnos, tengo que ir lejos de aquí por un tiempo debido a negocios—le avisé— vendrás conmigo?

—Y-yo nunca he salido de viaje —dijo algo asustado — yo vengo de una casa simple y... Bueno... Sin familia..

—Yo seré tu familia ahora gatito—susurré cerca de sus labios para luego besarlo con ternura — puedo contarte mi historia, tu puedes contarme la tuya... Porque...creo que te estoy amando...

—Y-yo tengo miedo de morir, hace un año mas o menos me diagnosticaron, estaba por cumplir 13 cuando le dijeron a mi padre, el cual fallecio no hace mucho, su esposa cuando él murió me culpo, y ese día que llegue aquí llevaba dos días perdido en la calle pues solo me se el camino de casa al hospital y el camino a la escuela a la cual no voy desde que me diagnosticaron leucemia...

—Yo estuve a punto de casarme en Japón, con un chico, tuvimos jna relación de dos años si no recuerdo mal, pero falleció por tener cáncer y otra enfermedad que no pudieron controlar por notarlo tarde, después de eso me convertí en empresario, comencé con tráfico de drogas, luego tráfico de chicos como esclavos exóticos a personas de otros países. Ese día que tuve que llevarte al hospital y supe que tenías cáncer te me hiciste más parecido, y tuve ganas de protegerte cosa que no senti con Yukio, creo que... No lo amaba  como lo pensaba —alze la vista y lo mire sonriente— aunque no merezco que me recibas en la manera que quiero, no después de todo lo que hice contigo.

Noté su mirada sobre mi y una de sus frías manos se posó sobre la mía, fue cuando senti sus suaves labios sobre los mios en un beso sin sentimientos, quizas solo estaba probando.

Se separó sonrojado, pero volvió a besarme poniendo sus brazos en mis hombros, mis manos se movieron a su cadera y de paso monosee su trasero, pero recordé que debía viajar en dos horas y no tenía mis maletas.

—Debemos volver al departamento —lo baje de mis piernas dejándolo de pie— hay maletas que hacer —me puse de pie y sonreí un poco.

Camine a la salida de mi oficina junto a el, luego fuimos al ascensor y subimos en cuanto llego a nuestro piso, había una atmósfera incómoda entre ambos, me vuelvo a sentir como un adolescente enamorado.

Bajamos tranquilos y al llegar al coche le abrí la puerta para que subiera primero, se subió tranquilo, aunque fue raro, Yukio se hubiese sonrojado, al parecer si son bastante distintos después de todo.

—Por cierto tu.. Tu también sientes algo por mi? No es tema después de todo simplemente desde el principio quería decirte que podías irte si gustas, si no puedes estar juntos a mi... Claro..

—Yo... No puedo hablar sobre eso ahora—susurró abrazando sus rodillas algo desanimado— Quiero ser libre un tiempo no quiero hablar de nada con nadie sobre nadie vale?

Trage saliva y desvíe la vista, eso fue algo duro...