Primer acto

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Ahí estaba (otra vez) Kang Daniel en la oficina de servicios escolares, con la corbata floja y el cabello revuelto, mirando hacia abajo a la joven profesora sentada en el escritorio frente a él.

—No entiendo, ¿cuál es su problema? —preguntó obstinadamente cruzándose de brazos—. Todos los demás profesores saben lo importante que es el que ganemos la próxima temporada, y el equipo no podría hacerlo sin su mejor bateador.

La señorita Kwon rodó los ojos.

—Es por eso que los deportistas son unos imbéciles engreídos —susurró apenas audiblemente.

—¿Perdón?

—Dije que es por eso que voy a darte los créditos necesarios —dijo la profesora y Daniel sonrió—, pero no será tan fácil.

La sonrisa del chico se borró, se dejó caer sobre el asiento con expresión de fastidio y miró a la profesora con los ojos entrecerrados.

—¿Tendré que hacer el examen de recuperación?

—No, aun si consigues un 100 en ese examen no sería suficiente... pero, si consigues un 100 y además obtienes créditos por actividades complementarias, entonces podrás jugar sin problemas el próximo semestre.

—¿Qué tipo de actividades?

—Necesitamos una persona más en el club de drama.

Daniel solo la miró atontado, ¿había escuchado bien? 

¿Club de drama? Demonios, no.

—Debe estar bromeando.

Los miembros del club de drama eran unos completos raritos, una vez compartió una clase con ese chico Ong que siempre estaba haciendo cosas extrañas como escupir leche por la nariz en la cafetería y el resto de sus amigos no parecían más normales.

—No, no es ninguna broma, si quieres jugar béisbol la próxima temporada, te espero en el teatro en media hora—dijo la profesora y se marchó.

Daniel maldijo internamente, necesitaba esos jodidos créditos, no solo para jugar béisbol, también tenía que aprobar esa estúpida materia si no quería repetir el semestre entero.

Tomó su mochila y salió azotando la puerta de la oficina con fuerza.

Era su último año, tenia que ser genial, divertido e interesante, no quería pasar las tardes de su penúltimo semestre de preparatoria encerrado en un teatro con un montón de fenómenos.



🍑🍑🍑

Todos los presentes lo miraron con la boca abierta cuando entró al teatro vistiendo la chaqueta deportiva del equipo de béisbol y con las manos metidas en los bolsillos.

—¡No me lo creo! ¡Es Kang Daniel! —susurró Daehwi con un gritito emocionado.

—¿Qué hace el jodido Kang-beisbolista-estrella-Daniel en mi santuario? —preguntó Seongwu también susurrando, sin embargo, Daniel fue capaz de escucharlos a ambos.

—¡Reúnanse chicos! —gritó la profesora antes de que Daniel pudiese decir cualquier cosa— Niel va a ayudarnos este semestre para obtener sus créditos extra, trátenlo bien.

La habitación se llenó de murmullos y a pesar del tono bajo de las voces Daniel alcanzaba a escuchar partes de conversaciones debido a la resonancia del lugar, todas sobre él, por supuesto.

Romeong & Daliet [Wanna One] 《OngNiel》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora