El fin de una época

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-La vida humana en la Tierra ha desaparecido...

No volví a ver a ningún ser humano, en la televisión sólo quedaban las viejas transmisiones, no volvieron a haber noticias ni en el periódico, todo el tiempo veía mascotas muertas en sus casas debido al hambre y a la sed, según lo que veía la humanidad estaba extinta, y dentro de poco yo también, después de todo SOLO TENGO 13 AÑOS, no podría sobrevivir yo solo... de no ser porque mi ingenio es muy superior al promedio, supongo que tendré que dedicarme a hacer un refugio.

...

-Vamos Jessica piensa, cómo podría yo, una simple chica de 14, podría resolver un problema tan grande...

Desde hace dos días no veía rastros de vida humana, lo más cercano a otro humano era mi perrita Flufy, la cual no se porqué no murió.

-Toma Flufy, mira un poco de comida...

-Guaf! Guaf!-ladra moviendo la cola.

-Bueno al menos tú estás feliz...

Mis padres me dejaron una foto antes de morir, me la dieron en el mismo día... en que... (el llanto llega) es que... ya no puedo seguir escribiendo en este diario...

...

-Ahora que lo pienso, podría entrar en alguna de las casas del vecindario-dice con un martillo y un tronco en las manos-pero tendré que buscar comida y agua potable, ah si! ESTOY EN MADRID NO NECESITO BUSCAR ESO!!! SOLO TENGO QUE ENTRAR EN UN ALMACÉN Y TOMAR ALGO!!!-dice golpeando la puerta de una casa.

Lo único de mis amigos que quedaba en mi vida era un teléfono móvil con energía infinita, en el cual habían varias fotos que preferiría borrar, pero mi humanidad me lo impide, era la sensación de seguir queriendo negar el presente, de no aceptar lo que estaba pasando, pero esa sensación estorbaba en varias ocasiones...

-La vida fue restaurandose y la balanza de la vida fue nivelandose, el ser humano dejó de destruir la Tierra...

Un día caminando por Madrid, estaba buscando harina de pancakes, ya que en la tienda local no había, y caminaba porque mi bicicleta estaba dañada. Había una tienda a unas cuatro cuadras de mi casa, era pequeña pero tenía muchas más cosas que en la otra, tomé mi harina de pancakes y un refresco de naranja que había en la nevera.

-Oye sabes Tom... Qué pasa Tom?... Me sorprende que te tomes tan bien el fin del mundo Tom... Oh! Gracias Tom!... JAJAJAJA!!! POR QUÉ HABLO CON MIGO MISMO???!!! JAJAJAJA!!!

...

Flufy y yo empezabamos a sentir frío así que encendí la calefacción. Sentada en el sillón con la calefacción encendida, me puse a pensar que debería dedicarme a buscar a algún superviviente, tal vez el o ella y yo podríamos ayudarnos mutuamente, y tal vez y solo tal vez podríamos tratar de recuperar a la humanidad, pero no estoy lista para eso...

-Sabes Flufy... deberíamos usar la motocicleta de papá para irnos de aquí y buscar a alguien, no crees?

-Hum?-hace un gesto tierno de curiosidad con el cuello girando la cabeza.

-Qué tal... Madrid?

-Guaf!

-Desearía que me entendieras... pero supongo que me basta que me ayudes en no caer en la locura-dice acariciandole la cabeza.

Adan y EvaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora