Capitulo 10

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LOS 4 CASTIGOS, mejor dicho, 5, estaban en el salón de la casa, alrededor del sofá donde se encontraba sentado el capitán del equipo. Por suerte la herida no era profunda, lo cual, en 4 dias, probablemente ya podría andar pero por el momento asta que no se recuperará, debía cederle el puesto de Capitán a otra persona, y el mas indicado era Reiner Braun

Lawliet: Reiner... Tu seras el... capitán... asta que me recupere

Reiner: Esta bien Capitán

Natsu: Y por que el y no yo?!

Lawliet: El es mas maduro... y se controla mas... Teneis que encontrar a alguien con información...

Reiner: Yo iba antes de entrar en la policía militar a un club subterraneo, conozco a un chaval... Natsu, tu y yo iremos a la aldea de la tierra e investigaremos junto con G4TO, Rin, Temari, os quedareis cuidando al capitán.

Rin/Temari: Vale

Reiner: G4TO, tu déjales el equipo de auxilio por si acaso el capitán necesita algo

G4TO: Claro, ahora mismo

Reiner, Natsu y el gato, se levantaron de sus asientos, dispuestos a partir rumbo a la aldea de la tierra, la aldea natal de Reiner. Antes de salir, la lluvia comenzó de nuevo, haciendo que Reiner y Natsu agarraran unas capas anchas y verdes. Antes de salir, Reiner le sacudió el pelo a Rin, haciendo que su cabello azul se alborotara por completo.

Reiner: Cuida de la diosa del viento *sonriendo*

Rin: C-claro *nervioso*

Temari: No hace falta que nadie me cuide, jirafa rubia

Todos comenzarán a reir menos Lawliet que se hundió en un profundo sueño. Era la primera vez que todos le veían dormir lo cual se quedaron impactados al ver a su capitán durmiendo. Reiner, Natsu y G4TO salieron de la casa, con las gotas de agua de la lluvia corriendo por la capucha de su capa, Reiner parecía algo triste.

Natsu: Que te pasa?

Reiner: Hay algo que no sabeis de mi, Natsu

Natsu: Pues cuentalo

Reiner: Ojalá pudiera... Te lo diré cuando lleguemos... El club al que vamos no es un club cualquiera...

Por el camino Reiner cada vez parecía estar mas preocupado, los otros dos acompañantes no entendían el por que, su compañero estaba decaído. Al fin llegaron a la aldea de la tierra, los tres entraron en un callejón oscuro donde había una alcantarilla en la que ponía DOWN.

Reiner, agarró la alcantarilla y comenzó a bajar unas escaleras.

Reiner: Vamos, bajar y no digáis nada

Natsu: Vale

Cuando al fin tocaron suelo se encontraban en las cloacas. Reiner observo muy serio de lado a lado, como si quisiera encontrar algo. De repente, comenzaron a escuchar una risa.

Natsu: Reiner... Escuchas? *asustado*

Reiner: Natsu no te asustes *mirando a la derecha*

Donde Reiner estaba mirando, se encontraba una puerta en la que ponía en grande ENVIDIA. Según su oido de ahi venía la risa, la cual al rubio se le hacía muy familiar. Sin pensarlo fue rápidamente hacía la puerta y la comenzó a golpear muy fuerte.

Reiner: Envy!!! Se que eres tu!!! Abre la maldita puerta!!! *golpeando*

Natsu: Envy...? *acercandose al rubio*

Envy: A que has venido rubiales? *risa*

Reiner: Abreme y te lo explicaré

La puerta se abrió y enfrente se encontraba un chico con el pelo parecido a el de una palmera con una cinta en su frente. Con una camiseta que le llegaba por el pecho y unos pantalones cortos con sandalias. Se mostraba una sonrisa malvada en su rostro.

Los 4 castigosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora