04

445 70 8
                                    

Alonso había llegado a casa, Becka se encontraba en la cocina cosa que se le hizo extraña al castaño pues se suponía que saldría con Mili.

-Hey ¿llegaste temprano?- Becka lo miró con los ojos rojizos, había estado llorando- ¿qué te pasó?- se acercó rápidamente a ella.

-Fuimos a "Red", pedimos nuestras bebidas, bailamos, todo iba de maravilla.

-¿Y luego?

-Vimos a Bryan.

-Oh por Dios- la abrazó- lo siento tanto nena.

-Fue horrible, me la pasó a ella, por el frente y como si nada- su voz se quebró al punto de no poder seguir con su relato.

-Bryan es un imbécil, tu eres una chica hermosa y él aún no se da cuenta de todo lo que perdió, pero cuando lo haga se va a arrepentir de perderte princesa- las palabras de Alonso vaya que tranquilizaron a la chica.

Ambos se fueron a dormir, eran ya las primeras horas del sábado y aunque no tenían que ir a la universidad, era demasiado tarde como para que siguieran despiertos.
La mañana tardó poco en llegar, eran las 10:00am.

-¿Quieres huevo o cereal?

-Creo que sólo cereal Becka, ya es bastante tarde, pronto tendremos que almorzar.

La rubia colocó dos tazones en la mesa del comedor, sacó la leche del refrigerador y tomó de la alacena el cereal favorito de ambos.

-¿Y cómo te fue ayer? Llegaste más tarde de lo normal.

-Ah pues, me fue bien. Hubo algo de movimiento, de hecho fui a Red por un usuario.

-¿No estaba tomado verdad?

-¿Qué? Pff claro que no, sabes que no llevaría a nadie en estado de ebriedad.

-Eso espero Villalpando.

Terminaron su desayuno mientras miraban algo de televisión, su segunda mejor amiga. No podían vivir sin ella.

-¡Mili!- gritó Becka de la nada.

-¿Qué con ella?

-Quedé en llamarle ayer, ¿cómo pude olvidarlo?

-Espera, ¿no se supone que fuiste con ella a Red?

-Sí, sí. Pero cuando pasó lo de Bryan decidí irme y ella se quedó.

-¿Te dejó venir sola? ¿Cómo se atreve?

-Tranquilo Sito, ella quería acompañarme pero le dije que se quedara. Es que no sabes, pero estaba con un chico súper lindo.

-Wow, wow, wow para tú carro ¿Mily con un chico? ¡Pero es lesbiana!

-Bueno, no es que estuviesen coqueteando o algo pero la estaban pasando bien y ya vez que ella no es de entablar relaciones fácilmente.

-Por un momento pensé que... Olvídalo. Tú háblale a Mili, voy a ducharme.

El castaño se dirigió a su habitación para buscar un cambio de ropa, entró al baño y se despojó de su vestimenta para después meterse bajo el chorro de agua.

-No puedo creer que acabo de mentirle a Becky- se sentía mal de engañar a su mejor amiga, pero no podía hablarle de José.

Solicitud de viaje.
Valeria Mendoza.

[Aceptar]

Era el primer viaje de la tarde, y esperaba que hubiesen muchos más, tenía que reunir la mayor cantidad de dinero, los ahorros que él y su mejor amiga tenían se estaban agotando.

A eso de las 7:00pm pasó al súpermercado, la leche se había acabado en la mañana y ya no tenían papel higiénico ni shampoo. Estando ahí, decidió comprar lo que era su vicio, chocolates.

-Yo te conozco- una pequeña niña se había parado frente a él.

-¿A sí?- el la miró extrañado. La niña sólo asintió.

-Ayer en casa- entonces la recordó, era la niña que se encontraba en casa de Canela, sólo que ahora llevaba el cabello suelto y no en coletas.

-¡Hola! ¿Eres hermana de José?- la niña asintió- ¿Y está él aquí?- volvió a asentir- entonces el chico levantó la mirada buscando al chico pelinegro pero con lo que se topó fue con una mujer de 40 años aproximadamente caminando hacia él.

Cuando la mujer llegó a donde Alonso se encontraba tomó la mano de la pequeña.

-Te he dicho que no te separes de mí- miró al castaño- y que no hables con extraños- dicho esto se retiró apresuradamente.

-Disculpa a mi madre, desde que vio un documental de secuestro tiene la estúpida idea de que todos son secuestradores- frente a él se encontraba José, pero se veía diferente a la noche anterior. No olía a alcohol, su ropa estaba perfectamente alineada y estaba sobrio.

-Eh sí, sí. No te preocupes.

-Bien, adiós- le regaló una pequeña sonrisa antes de retirarse.

-Adiós- miró fijamente al pelinegro mientras se alejaba para reunirse con su familia. Si algo sabía Alonso en ese momento, era que tenía que volver a ver a ese chico.

UBER |Historia Jalonso|TERMINADA|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora