Voy a describir la isla en una sola palabra "mágica". Nada que ver a cómo se veía desde el hotel, del hotel se veía sin vida, pero ya estando en ella se veía llena de vida, lleno de árboles, palmeras, a lo lejos se veía un pequeño hotel, y cabañas alrededor, tenia como pequeñas colinas o bueno desde donde estaba se veían pequeñas.
Al bajar del barco pasar por el muelle llegamos a la playa, en esta habia un camino hecha de rocas y pétalos de flores que terminaban en un pequeño escenario.
-por favor acérquense un poco al escenario.- hablo una señora desde un micrófono que estaba en el centro del escenario. Todos nos reunimos cerca del escenario y subió un caballero un poco viejo y calvo con una sonrisa en su rostro y empezó a dar la bienvenida.
-que viejo más latero- se quejó Mari- hace mucho calor! Que se apure.- yo solo rodeé los ojos, pero tenía razón el señor era un poco latero
-oigan niñas-nos habló Katia- miren disimuladamente hacia la derecha, hay unos chicos que nos están mirando.- nadie en el mundo sabe exactamente el significado de "mira disimuladamente" y Mary no iba a ser la excepción, bueno yo tampocom, así que lo primero que hicimos fue mirar no disimuladamente. Y hay estaba el, mirándome, con esos ojos penetrantes, con esas arrugas que se le formaban alrededor de sus ojos cada vez que se reía, con ese pelo desordenado que se movía con el viento y ..-Esme lo conoces?- me pregunto Mary.- yo creo que si por la forma en que te mira- le respondió Katia. Y era verdad, el no dejaba de mirarme y sus amigos también, estaba con dos chicos más, seguramente sus amigos, estos se reían y hablaban entre sí. -Esme?- me volvió a preguntar Mary y yo la mire, negué con la cabeza, no quería una interrogación de las niñas en ese momento. Me di vuelta y camine hacia otro lado, las niñas se miraron entre ellas algo confundidas y me siguieron.
-Esme qué pasó, quien es el?- me pregunto Katia cuando ya estábamos en otro lado con la multitud alrededor nuestro.
- el es el chico que me empujó en las escaleras, cuando fui al baño me lo volví a encontrar
-te hizo algo, fue grosero contigo- me interrumpió Katia
-no, pero tampoco se disculpó. La verdad es que es un niñito y no vale la pena hablar de el.
-estás segura?- me pregunto Mary
-si segura, miren ya termino de hablar el viejo, vamos con Mauro.
Nos juntamos con el grupo y todos juntos nos dirigimos al hotel y empezar nuestra aventura en esta isla.