Sucesos

37 3 0
                                    



Narra Kathe:

Orlando: - solo me ve rápidamente y al mismo tiempo, se acerca a la puerta de su habitación y la cierra dando un golpe leve –

Esther: Nos vamos ya? –me dice a la vez que voltea a verme-

Kathe: Ssssi....vamos... -rayos! Por un momento pensé que se había dado cuenta de lo sucedido, gracias al cielo y no.-

Nos despedimos de Sara y Johana y salimos rumbo a mi casa. Lo único que quería era salir de ese momento incómodo; al menos -para mi fortuna- no nos pudimos despedir de Orlando si no, saber qué cara hubiera puesto.

Al llegar a casa, vi un rato televisión, mi padre llegó del trabajo, mi hermana de la escuela, cenamos y me fui a la habitación.

Kathe: Qué vergüenza lo de hace rato, rayos me vio!!! – me cubro la cara con ambas manos aún invadida por la pena- Naaa! Tal vez le estoy dando muchas vueltas al asunto, ojalá y se le olvide a Orlando que me vio, y a mi que se me borre que lo estaba "espiando".

___________________________________________________________

Los días transcurrían y todo marchaba con normalidad, la escuela: todo iba bien, las tareas, presentaciones importantes y mi gran amiga de la escuela, Gabriela que por fortuna nos llevábamos muy bien desde primer grado y, hasta entonces (en la mera mera realidad jaja xD ) seguimos siendo grandes amigas :D

Hace poco nos habíamos enterado que Johana estaba embarazada, afortunadamente todo marchaba bien con su embarazo y cada vez más se hacía más cercana la llegada del bebé, que por cierto era un varón y se iba a llama Alejandro.

13 de junio 2008

Estábamos esa tarde en casa de los Morales platicando muy a gusto cuando de repente

Johana: auh! Sentí un dolor algo extraño en la espalda – dijo mientras se sobaba con una mano la espalda-

Esther: no será que es aire o un calambre? – le preguntaba algo insegura-

Johana: No, no creo ¡auh! Ahí está otra vez ese dolor!

Esther: no será que ya va a venir el bebé?!! Mejor se debería ir al doctor ya!

Johana: Pero Ricardo no está y Orlando no tiene licencia oficial aún para conducir.

Antonio: pero no importa, es más yo los puedo acompañar al hospital – mi padre sí tenía licencia pero era demasiado nervioso para atreverse a conducir y pues... así no ayudaba mucho que digamos jaja –

Todos nos alarmamos un poco pero al final, mi papá, Orlando y su mamá se fueron al hospital, donde ahí llegaría el papá de Orlando – ya que por motivos de trabajo no estaba en casa – Sara se iba a ir con nosotros para mi casa y por la hora que era, se iba a quedar en mi casa esa noche.

Ya entrada la noche mi papa llamó a mi mamá para darnos noticias:

Antonio: aló?

Esther: aló! Que tal, ya venís en camino?

Antonio: si ya vamos en camino, Orlando me lleva a la casa, y aprovechando el viene a traer ropa para Ricardo y otras cosas que pueden servir.

Esther: ah que bien, y como está Johana y el bebé? Todo bien?

Antonio: si todo bien, gracias a Dios. Ya vi al patojo (niño).

Eshter: Así? Y qué tal?

Sentimientos OcultosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora