Capítulo uno: El inicio de todo.

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Diecinueve de septiembre

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Diecinueve de septiembre. Las seis menos cuarto de la tarde.

Hora y día exactos de cuando todo esto empezó. De cuando la vida de Yoongi dio un vuelco de 180º.

Yoongi y Hoseok se encontraban paseando juntos, tomados de la mano y sonrojándose como dos colegiales que recién empezaban a salir. Su amor era puro e inquebrantable. Nada ni nadie los podía separar. Estaban cerca de tener cuatro años de relación, y todavía sienten esa mariposas en sus estómagos cada vez que salían juntos, como en la primera cita.

Tras ellos, se encontraba una chica sumamente atractiva de cabello castaño. Estaba viendo unos vídeos en una aplicación, y se encontró con una broma muy graciosa. Tenías que acercarte al primer chico guapo que vieras, decirle "¡Chico, chico, abre tu mano un momento, quiero darte algo!" Y si ese chico lo hacía, debías entrelazar tus dedos con los suyos y responder "Soy yo, ¿me quieres?". Era bastante gracioso ver las reacciones de esas personas, y esa chica quería intentarlo.

Su objetivo: Yoongi.

La chica comenzó a acercarse hacia aquella pareja, en concreto, a ese chico de cabellos rubio que era ligeramente más bajo que el otro chico con el que estaba. Tal vez no debería hacer eso, pues se notaba a la legua que eran pareja, sin embargo es una pequeña broma, no haría daño a nadie. En el caso de que hubiese un malentendido, ya lo solucionaría ella misma y todo arreglado. Nada debería salir mal, ¿no? Encendió el móvil y se preparó para grabar.

—¡Chico, chico! —comenzó a llamar, y los dos se dieron la vuelta al mismo tiempo—. Abre tu mano, te tengo una pequeña sorpresa —lo dijo mientras miraba fijamente a Yoongi y de forma discreta le apuntaba con el móvil.

Él, extrañado, accedió y le extendió la mano. Sorpresivamente, ella entrelazó los dedos con los suyos y esbozó una enorme sonrisa.

—Soy yo, ¿me quieres?

El rubio se sonrojó abruptamente. No, no era por la chica en si, sino que aquello le había pillado por sorpresa. Hoseok, que había presenciado esa escena, soltó la mano de su novio y se fue de ahí, enfadado por no haber rechazado a la chica al segundo y por haberse sonrojado como un idiota sin que Hoseok fuera el motivo de ese rubor.

—¡Espera, Hoseok, no es lo que parece!

Yoongi fue corriendo tras él, y accidentalmente se trajo a rastras a la chica, que recién había puesto en pausa la grabación. Ella no le había soltado, y cuando quiso darse cuenta, ya se había tropezado con una piedra y caído al suelo. El rubio echó a correr y ni siquiera miró atrás cuando supo que ella se había caído.

¿Lo malo? Y no, no era lo de Yoongi, sino la situación en la que ella se encontraba. Justo se había tropezado en medio del paso de cebra con el semáforo en rojo. Cuando quiso levantarse, un camión de seis ruedas la acabó atropellando porque no había logrado frenar a tiempo. Lamentablemente, falleció casi al instante debido a que el camión había fracturado completamente toda su columna vertebral y costillas. Debido a sus costillas rotas, su pecho se hundió hacia dentro, aplastando sus pulmones, impidiendo que pudiese respirar siquiera. El corazón le había dejado de latir cuando se ahogó con su propia sangre.

Y aquí es donde empieza todo.

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⏰ Última actualización: Sep 23, 2018 ⏰

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