-Minho, ya llegaron los nuevo clientes. -dice Taehyun mientras entra con una carpeta riendo un poco. -Y son, algo extraños.
-Cosas peores hemos tenido. Diles que pasen. -Taehyun asiente y los va a buscar.
En unos pocos segundos tiene sentados frente a su escritorio a dos hombres muy extraños. Uno tenía una barba y bigote, que se notaban falsos, y el otro cabello rubio largo hasta los hombros, que también parecía falso.
-Bueno días este... -revisa el expediente y se asombra. -señores Lee.
-Oh por favor. Llámeme señor Kang. Espero pronto estar divorciado de este hombre. -se hace el indignado el de cabello largo.
-¿Vienen por un divorcio? Pero, si aquí en Corea del sur aún no es legal el matrimonio homosexual.
-Nos casamos en el Caribe. -interviene el de barba y bigote.
-Pues, creo que deben divorciarse donde mismo se casaron. -los mira de manera extraña. -¿Están ustedes bien?
-Yo me voy. -el de cabello largo se levanta y se va corriendo, casi chocando con la puerta de salida olvidando que estaba cerrada.
-¡Traidor! -el otro se levanta y va a seguirlo.
-¿Qué demonios? -Minho se levanta de su asiento para seguirlos pero cuando sale ya no hay rastro de esos dos extraños hombres.
-¿Qué fue eso? -Taehyun mira asustado hacia fuera al igual que Minho.
-No tengo idea. No se como dos personas falsas pudieron hacer esto. Tenemos las precauciones necesarias para evitar este tipo de bromas.
-Bueno, al menos ahora solo debemos hacer un poco de papeleo. Mira el lado positivo.
-Si... -sonríe un poco y decide entrar para hacer el papeleo.
Que personas más extrañas eran esas.
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Luego de graduarse de la escuela superior uno solo piensa en seguir estudiando para un gran futuro. Eso es lo que hizo Song Minho pero luego de diez años llegó el gran día de la reunión de la clase graduanda. Su amigo, Nam Taehyun, era uno de los o...