Love confusion | Samo

07.

Una nueva mañana en la que se estaba arrepintiendo por haber besado a Momo la noche anterior, recargó su cabeza en su escritorio con fuerza provocando un gran estruendo haciendo que su mejor amiga abriera enseguida la puerta.

—¿Qué te sucede a ti?— Preguntó Mina.

—Minari.— Abultó sus labios, una expresión que a la menor realmente le daba ternura. —La besé y me gustó pero ahora me siento maaaaal.— Seguía con su cabeza contra el escritorio.

—Si la quieres; deberías tomar la delantera y hacer las cosas bien con ella.— Aconsejó Mina.

—¿Hacer las cosas bien con quién?— Preguntó EunHa quién estaba en la puerta escuchando solamente lo último.

Sana se levantó enseguida, acomodándose en su silla dando una mirada a Mina, no sabía que excusa dar, después de todo su amiga la había metido en ese problema.

—A... ¡A ti! Debe hacer bien las cosas para el día que sea la boda.— La mejor excusa que se le pudo ocurrir.

Sana solamente suspiró, pensar en algo como la boda realmente no le gustaba, sumando que ahora no conocía con exactitud que clase de sentimientos era los que tenía en su corazón, amaba a Momo pero algo de ella no dejaba de querer a la coreana.

—La dejaré solas.— Dijo Mina para retirarse enseguida.

—¿Haz pensando en una fecha para la boda.— Preguntó la coreana mientras se sentaba en las piernas de su novia, con una sonrisa en sus labios.

—Aún no estoy segura. Digo, estos días hay mucho trabajo y no sé cuando podré estar libre para planear todo.— Dijo Sana, abrazando la cintura de su novia, era hermosa, realmente la quería pero no sentía lo mismo que con Momo, algo no estaba bien en sus sentimientos. —Tengo una junta importante, honey, creo que es mejor que me vaya de aquí.—Agregó.

La coreana solamente frunció el ceño, estaba preocupada por si Momo había abierto la boca desde temprano, no quería perder su relación con la japonesa.

—¿Haz hablado con Momo?— Preguntó la chica con una sonrisa que para Sana era imposible descifrar, no entendía esa pregunta.

—¿Qué? ¿Por qué piensas qué lo hice?— Preguntó nerviosa.

—No sé... Son buenas amigas por lo visto aunque no me haz contado más de ella.— Dijo la chica ahora con una expresión que denotaba seriedad.

—¿Debería hablar con ella? Sólo es una amiga de la infancia, no debes preocuparte.— Trató de calmar el ambiente, sus pensamientos sólo eran que EunHa podía sospechar algo. — Me voy, es hora de la junta con todos los empresarios en otro lugar.—Quería huir de ese momento, no se sentía completamente preparada para luchar con la verdad que podía lastimar a la maravillosa chica que tenía como prometida.

—¿Me podrías llevar al estudio de grabación? Quiero pasar al menos un rato contigo... Últimamente me siento muy sola, ya no estás tanto a mi lado.— Se levantó del regazo de su novia, bajando su mirada, ese sentir era cierto; desde la llegada de Momo se sentía descuidada por su novia, no la sentía como anteriormente.

—Vamos rápido pero... Hoy podrías ir a dormir a mi casa, claro, si estás libre.— La japonesa sentía la culpa de descuidarla, no debería ser así por su prometida.

—¡Bien! Entonces hoy en la noche me la pasaré a tu lado.— La abrazó con fuerza, saliendo de la oficina pero Sana se distrajo mirando a Mina por un momento, notando como EunHa besaba con furor sus labios a pesar de que estaban en la recepción, era un comportamiento para nada peculiar en la chica. Al momento de separarse pudo ver a Momo ahí parada, con su mirada triste y a la vez denotaba la molestia del momento.