Pasándola bien cabrón.

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Después de tantos porros fumados nos dábamos cuenta que nos sentíamos más felices y eso era bueno en nuestra amistad, pasaban los días las horas los segundos pasaba todo y siempre andábamos bien drogo por  tanta droga que consumíamos a diario.

Se acercaba una fiesta y obviamente fuimos a pasarla bien cabrón y otra vez llevaba mis poderes 15 porros, 3 tarros de popper, 3 bolsas de tussi, de clonazepan y  6 bolsas de perico algunas eran para venderlas y las otras eran para consumirlas en la fiesta tan así que siempre la plata que invertía en las drogas la volvía a tener por tener mis negocios.

No había sábado que no saliéramos y domingo que llegáramos de amanecida a nuestras casas estábamos desaprovechando nuestras vidas con tanta droga. Aveces uno consciente se pone a pensar que tanto daño eso produce en uno, pero como habían veces que me ponía a pensar que sin la droga no la fuera conocido a ella. Son pensamientos muy contradictorios que me llamaban la atención y por un momento de la vida tomaría un cambio en mi...

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