KakaNaru. ~Tu Me Haces Sentir Aliviado~

Prólogo

Había pasado la tarde tranquilo sentado bajo la sombra de un árbol, pensando en porque los aldeanos lo odiaban tanto, no es como si el les había hecho algo, sin embargo siempre lo golpeaban o lanzaban rocas o botellas cada ves que se acercaba a un niño tratando de jugar con el, la aldea parecía minimizarlo, como si no existiera eso hacía que el niño se sintiera con una gran soledad, a pesar de que apenas tenia 8 años de edad.
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De pronto el niño se encontraba corriendo por toda la aldea tratando de huir de cinco hombres que iban con la pura intensión de lastimarlo.

Lo odiaban tanto que habían decidido que el día de su cumpleaños siempre lo torturarían hasta dejarlo inconsciente, al menos eso era lo que el niño pensaba, ignorando por completo cual era la realidad por la cual los aldeanos siempre lo perseguían ese día para lastimarlo hasta llegar a la inconsciencia.

Demonio.

Monstruo.

porque no te mueres de una ves.

nadie te quiere en esta aldea maldito demonio.

terminaremos lo que el cuarto empezó.

Esta noche te mataremos de una ves por todas maldito demonio.

Allí estaba el, corriendo hasta donde sus piernas lo permitían, escuchando todo lo que los aldeanos le decían y pronto sus ojos se cristalizaron por querer llorar sin entender porque siempre le decían demonio y monstruo y lo trataban como la peor basura del mundo 'tal ves nunca debí haber nacido' pensó Naruto con sus ojos aún cristalizados por la lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos. El niño a cada segundo se sentía mas cansado y jadeaba a mas no poder, de pronto, debido al cansancio, se tropezó en sus propios pies cayendo en la calle pavimentada raspando su pecho y brazos ante el impacto, se quedo allí jadeando de lo cansado que estaba de huir, pero tan pronto como calló se levanto para seguir huyendo, pero para su gran mala suerte tan pronto como se levantó y comenzó a correr fue agarrado del cuello de su camisa y halado hacia atrás haciéndolo caer de nuevo acostado al suelo sobre sus espaldas, en ese momento el pequeño Naruto entendió que ya no podía escapar y que sería golpeado nuevamente si saber el porque.

"A llegado tu hora maldito zorro" dijo uno de los aldeanos. Naruto había sido rodeado por los cinco aldeanos y de pronto una patada llego justo a su mejilla derecha haciendo que el pequeño Naruto cayera de golpe nuevamente al suelo, rápidamente el llevó una de sus pequeñas manos a su mejilla golpeada por el aldeano y ya se encontraba llorando por el fuerte golpe que había recibido, pero no solo eso, también lloraba de miedo pues el sabía que seguirían golpeándolo. De pronto uno de los aldeanos lo agarro del cuello y lo tiró hacia un callejón oscuro que había cerca, el niño se sentó "por favor no me golpeen" dijo Naruto recordando que hace una semana también había sido golpeado."cállate" gritó otro aldeano haciendo que el niño se tense ante el grito "acaso tu te detuviste cuando mataste a nuestros amigos y familiares" dijo el mismo aldeano haciendo que Naruto se hunda en sus propios pensamientos '¿Que? yo no recuerdo haber matado a alguien' pensó Naruto " yo no he hecho nada" dijo Naruto con las lágrimas aún cayendo por sus mejillas, tan pronto como dijo eso fue agarrado nuevamente del cuello y estrellado en una pared para ser golpeado varias veces en el estomago "como te atreves a decir que no has hecho nada maldito demonio" dijo el aldeano que lo golpeo soltándolo de su agarre y dejándolo caer al suelo nuevamente, este cayó al suelo tosiendo y la sangre comenzó a salir de su pequeña boca, tan pronto como cayó al suelo comenzó a ser pateado una y otra ves por los aldeanos "AHHHHHHHH" gritó Naruto mientras seguía siendo pateado "por favor ya no me golpeen" dijo Naruto, casi imperceptible lo que quería decir debido a los golpes que estaba recibiendo.
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~Punto de vista de Kakashi~

Estaba corriendo a la aldea ya que llegaba de una misión cuando de pronto algo comenzó a incomodarme sentía como si algo malo estuviera pasando en la aldea, a cada minuto me sentía mas angustiado por ese extraño sentimiento que de pronto había inundado mi cuerpo. Por fin llego a la aldea y cruzó rápidamente las grandes puertas de la entrada a la aldea dirigiéndose hacia la torre del Hokage.