Capítulo 1

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Me encontraba saliendo de clases de anatomía de los dinosaurios. Es una clase muy interesante e importante. Ya estoy a tres días de graduarme como paleoveterinaria, aunque todavía voy a ejercer como cirujana plástica, ya saben, para tener dinero para mantenerme, aunque tengo demasiado como para vivir con lujos.

Ya casi en la salida, escuche un grito. Era una voz masculina muy conocida para mí.

Era Tom Carter, el tipo más engreído y narcicista que he conocido en toda mi vida. Era tan despreciable que su madre le decía que no regresará hasta las diez de la noche. Y lo peor es que el quería conquistarme. Lo que no tomaba en cuenta es que estoy entrenada para defensa militar, así que se muchas llaves y candados, hasta maneras de como eliminar personas conflictivas en tan solo 20 segundos. De verdad que este chico me fastidia demasiado.

-Hola nena, me preguntaba si quieres ir por un trago a las ocho de la noche- Dijo seductoramente. Yo estaba aguantando lo mejor que podía.

-No Tom. Tengo turno a partir de las seis en preoperatorio y muchas cirugías durante los siguientes seis meses, así que adios- Me fui a mi auto, en esta ocasión era una Traverse 2018.

En realidad si tenía turno, pero era hasta las nueve, aunque quisiera salir con el tipo no lo hubiera hecho porque al trabajo no puedo ir en ese estado.

Pare en un restaurante de comida mexicana, la cual es mi preferida, y me sente en una mesa. Espere un minuto en lo que me atendían. Ordené unos ricos sopes, con lechuga, tomate, cebolla y mucho queso. Los deboré con un poco de prisa, pero si los disfrute. Pague y deje propina para ir a mi casa. Tenía tres horas para alistarme.

En mi casa hice algunos pendientes que tenía, como trapear, lavar la ropa y los platos, tender mi cama y guardar la ropa. Sí. Tengo una vida muy agetreada. Termine en una hora y media.

Tome una ducha relajante en la bañera, con espuma y escencias. Me mantuve ahí veinte minutos. Me vestí con una falda ajustada de color negro que me llegaba tres dedos arriba de la rodilla y una camisa morada. Iba así porqué es más elegante y hacía un calor insoportable, digo, estamos en California.

Agarrr las llaves de la camioneta y cerre la puerta de mi casa con llave. Arranque y fui a mi próximo destino, el Hospital Grey-Shepherd.

•••

En los vestidores no había nadie, me puse mi bata y cogí mi estetoscopio para ir al piso de post-operatorios, para ver como seguían mis pacientes, de paso checar que cirugías tenía programadas en el pizarrón.

-Hola Rose, ¿Cómo está?- Le pregunté a la jefa de enfermería. Era una señora un poco mayor, con un chongo en la cabeza, un poco de arrugas en el rostro y la nariz chueca, aunado a su prognatismo mandibular, necesita una rinoplastía y una maxilofacial.

-Muy bien doctora Hunt, ¿Cómo le va en la escuela?- Preguntó ella con una sonrisa amable.

-Súper bien, en tres días me graduó- Le conteste.

-Le deseo suerte.

-Gracias- Le sonreí- ¿Me podría dar los expedientes de mis pacientes?, para anotar sus evoluciones.

-Por su puesto- De su escritorio saco cuatro carpetas y cada una tenía el nombre del paciente en uno de los lados.

-Muchas gracias- Fui al cuarto de Sam Steele, a el le practiqué una otoplastía ya que sus orejas estaban muy separadas de su rostro. Le cheque la sutura y los níveles frecuencia cardíaca, los cuales estaban excelentes.

Jurassic World: Reborn Kingdom [Owen Grady & ___]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora