Apenas podía creerlo... ¡¿El?¡Caminado entre los puestos de mercaderes! El era Stephen Strange, un hombre con muchas ocupaciones ¿Porque demonios debía estar su tiempo en aquellos lares? La respuesta se resumía en una sola palabra o mas bien un nombre "Franz" Maldito había sido el momento, en el que aquel estúpido vendedor ambulante, había decidido adelantar unas semanas antes sus vacaciones y dejar con pocos suministros, no solo a el sino también a los colados de sus colegas. Quienes al enterase del pequeño viaje que haría con tal de tener los ingredientes, medicamentos y repuestos necesarios... No dudaron en hacerle "un par" de encargos, los cuales de no ser por la influencia, beneficios y años de... ¿amistad? Con estos, bien los habría mandado a probar suerte profundidades de Fryby, donde harían compañía a los restos de Franz, el que por supuesto seria el primero en morir a garras de las bestias.
Con aquellos pensamientos, el dragón camino de puesto en puesto, apretando ligeramente los puños y maldiciendo en mente. Agradecía que aquella fuera la ultima zona que visitar, para finalmente llegar a su lugar de hospedaje y descansar para partir al día siguiente... Avanzo, adentrándose cada vez mas al lugar, notando un ligero cambio en cuanto a los objetos que había en venta variando entre ojos, garras y otros partes a libros de portadas ostentosas y brebajes burbujeantes.
Las personas que frecuentaban el lugar parecían ir siempre con un objetivo fijo, notando como una vez adquieran lo que era de su interés se retiraban, sin detenerse a curiosear en algún otro puesto. A diferencia de las otras zonas los mercaderes no alzaban la voz ni mucho menos competían por la atención de la gente, dando un ambiente tranquilo e incluso sombrío, hasta el momento que unos murmullos se hicieron presentes. Por su puesto, Stephen, ignoraría aquel detalle, mas cuando mas gente comenzó a ir en una dirección en común, siendo "el porque" de aquello lo que logro convencerlo, queriendo comprobar que lo que sus oídos captaron era cierto...
El tumulto de gente empezó a rodear a un misterioso hombre, quien vestía con traje y sombrero negro. El tipo en cuestión se encontraba en una improvisada y pequeña tarima, la cual tenia a su lado una lo que parecía ser jaula oxidada, siendo aquello lo que dedujo, al estar esta ultima cubierta por una maltratada y sucia manta grisácea. Vociferando y haciendo extraños ademanes, hablando como si cualquiera que fuera su producto fuera la maravilla del mundo. Una vez captada toda la atención, sin borrar aquella inquietante sonrisa el hombre coloco la mano sobre la manta para retirarla, dejando ver dentro de aquella jaula a un delgado y pálido ser (Quien a duras penas cabía en la pequeña jaula que lo tenia cautivo), el cual abrazaba sus piernas y ocultaba parte de sus rostro entre estas quizás al oír como se intensificaba el mar de murmullos, mientras que su vendedor observaba tranquilo el revuelo que había causado. Permaneció callado por un par de minutos.
- Acepto ofertas -Dijo, para volver al silencio y ser bombardeado por distintas ofertas.
Strange veía desde lejos aquel evento, permaneciendo lejos del tumulto de gente, pero lo suficiente cerca como para ver el espectáculo... El escándalo era algo muy por fuera de su agrado, mas decidió quedarse cerca por el morbo, después todo cuando volvería a surgir la oportunidad de ver un ser humano.
" ¿Enserio gastaras tu dinero en esa cosa?¿Porque gastar tu dinero en el?¿Cuanto durara?¿Veinte, quince años?" Oyó discutir a un grupo " Con aquellas pintas lo mas seguro es que ni siquiera pasara un década" Agrego otro, recibiendo la sonrisa burlona de su compañero quien con sonrisa ladina respondió un: " Me da curiosidad cuanto aguante puede tener un humano" para gritar luego su oferta.
Comentarios parecidos secundaron a este, algunos apostando sobre la resistencia del humano, otros viéndolo como un juguete al cual torturar e incluso llego a escuchar que unos simplemente buscaban un bocadillo exótico con el que alimentar a sus mascotas...
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Teach me, Master
FanfictionMidgard, un mundo habitado por demonios, elfos, dragones y un sin fin de criaturas, que viven en conjunto de manera normal, guiándose principalmente por el estatus u posición de cada individuo... ¿No sabes la hora? Fácil, solo hace falta ver el colo...