Amigas, atracción y amor. (Flozmin)

Capítulo 13: "esto no queda así"

-Que tonta que soy, me la perdí.-Gritaba vero al contarle como fue todo con jaz.

-La verdad que sí, pero tampoco es tu culpa acepta que te sentías mal.

-Esta bien, ¿Salimos?

Así fue como esta noche ella y yo nos fuimos, fuimos a pasar la noche en una gran fiesta en el bosque, al otro lado de la ciudad. Nos quedaríamos a dormir así que no tendríamos que preocuparnos por la cantidad de alcohol y manejar por la noche.

Cuando llegamos sentí un presentimiento de que algo innovador pasaría hoy, no se bien en que momento pero estoy segura de que así sería y me limité a disfrutar de cada música y cada detalle que formaban a la fiesta.

En medio de toda la música y el alcohol que teníamos en sangre Verónica gritaba.

-HEEEEY!! FLOOORR ALLÁ HICIERON UN JUEGO QUE ESTÁ BUENÍSIMO, VAMOS DALE!!- Literalmente estabamos a dos centímetros pero la loca me gritaba y bueno, fuimos a jugar.

-Chicas ¿Juegan?- Nos dijo un chico del colegio que yo desconozco su nombre.

-SII!- Respondimos ambas al mismo tiempo.

-Bueno, el juego consta en que hay dos grupos, éste es el nuestro y por otro lado está el otro grupo. Eso si, nadie debe saber cuales son los integrantes del equipo contrario. Entre cada uno de los equipos eligen a una persona y la meten al cuarto oscuro con vendas y tres vasos de wodka encima. Lo que allí dentro pasé quedará entre ustedes, esta permitido todo, excepto prender la luz y sacarse las vendas, ah, y pueden hablar, muy poco o en voz baja. ¡QUE COMIENCE EL JUEGO!- decía y avisaba al lado contrario que ya debían comenzar.

Esto se pone caliente.

La primer ronda fue Vero la última en entrar, teníamos el privilegio de saber con quién le había tocado compartir el cuarto una vez que ya estén dentro pero estaba prohibido decirle a quién habían mandado. Todo era secreto. Uff si Vero supiera quién le tocó se le caería el cielo en un instante, siempre fue su sueño.

Al salir de la habitación vi que estaba con una cara de disgusto hasta que se sacó las vendas.

-Qué tal te fue, eh?- dije en sentido burlón

-Amiga, eso fue asqueroso. Tenía el pene muy pequeño. No quiero ni imaginarme quién es.- Decía molesta mientras yo reía por su reacción. -De todas maneras, amo a las mujeres así que no me importa.

-Oí que hay personas del otro lado que sería un gusto experimentar con ellos/as.-levantaba las cejas de manera divertida.

Luego de unos minutos ya habían elegido a quien mandar al cuarto, ahora sólo faltaba nuestro grupo. Y sin más que decir, me eligieron a mi, Vero apenas escuchó mi nombre bajo la mirada y no me dirigía la palabra. Hasta que me tocó entrar y dijo "suerte".

¿Suerte? ¿Para qué necesitaría suerte?, a ver, son relaciones, besos quizá y nada más. Hay días que no entiendo a Verónica, cambia su humor tan rápido que ya me mareo.

Entré, sentí una abrumadora brisa que venía de la ventana abierta, la luz de la noche entraba por ésta misma.

Si, rompí una regla, me quité las vendas ¿Pero que más da? No veo a la otra persona que está a mi lado, esta todo oscuro literalmente.
Oí una dulce voz, un poco familiar se me hacía pero no podía pensar en cualquier cosa. Okay, era una mujer con quien me tocó. ¿Será por eso que estaba así Vero? Quizá porque me tocó una mujer y a ella un hombre. Es un juego.

-No digas nada, rompí una de las reglas- escuché su voz.

-No te culpo, yo también lo he hecho, tranquila- dije sin saber donde estaba.

-Ya veo, me ha tocado con una mujer.

-Así es.

Comencé a buscarla con las manos hasta que sentí uno de sus pechos, quité rápidamente mi mano y oí un gemido que venía de ella. Me estaba mojando sin razón.

Ella agarro mi rostro y comenzó a besarme, me besaba tan apasionadamente y esos besos tan cálidos. Al juntar nuestros labios mi respiración fue siendo irregular, mi centro palpitaba. Se me salía el corazón, no dudaba en querer saber quien es esta mujer.

Comenzó a subir mi ropa, sentí su mano cálida en mi abdomen, mi cuerpo empezaba a temblar. Tomé sus caderas y la traje más a mi, dejé que se juntaran más nuestros cuerpos y sientieran el calor que nos domina.
Le subí la blusa que traía puesta, recorrí con mis dedos su piel tan suave hasta que sentí uno de sus pechos, no traía sujetador, ¡AY MAMA!. Se alejó un poco de mi, haciendo que quitara mis dedos de ella.

-¿Por qué siento que ya te conozco?- dijo con una voz ronca que me excitaba.

-Yo siento lo mismo pero quizá es la conexión que tenemos aquí dentro.- dije en un pequeño susurro.

Volvió a pegarse más a mi, le quité la blusa por completo y ella hizo lo mismo. Apreté uno de sus pechos con fuerza, estaba gimiendo. Me quitó el sujetador con una mano mientras caminaba hacia atrás, un rincón del cuarto donde la luz daba justo.
Mientras me besaba tan apasionadamente, golpeó mi espalda con una de las paredes con la luz de la luna, tenía miedo por lo que podría pasar hasta que sentí su mano entrando en mis bragas, arquie mi espalda de tanto placer. Estaba jugando con mi clítoris mientras besaba mi cuello, lo mordia, me estaba dejando una marca.
Seguimos rodando hasta la pared, que en un momento abrí los ojos y me sorprendí.

-¿Te gusta Flor?- dijo con su voz ronca, mientras apretaba más y más. Era ella, era jazmín, ¿Cómo es esto?, ¿Qué hace aquí?, no, no puedo...Es tanto placer...

-¿Qué haces aquí?- mi voz era entrecortada

-Shh-colocó uno de sus dedos en mis labios, lo quitó y me volvió a besar. Me levanto de las piernas llevandome hasta la cama que había en el cuarto. Me tiró y quitó mie últimas prendas. Se subió arriba mío y fue hasta mis labios. Me besó.
Yo sentía sus pechos desnudos, sus pezones endurecidos en mi. Estaba muy nerviosa como excitada, era todo lo que deseé siempre y me estaba pasando. Pero, mi profesora, admito que siempre quise seducirla pero jamás imaginé que en poco tiempo la tendría para mi. ¿Qué más da?, tengo que aprovechar.

La di vuelta de tal manera que yo quedara arriba de ella, la besé lentamente hasta que llegué a sus pechos, succione uno por uno. Me agarraba del cabello mientras gemia mi nombre con voz ronca. Seguí mi camino de besos hasta llegar a la tela de sus pantalones, se los quité de una brusca manera, ahora estaba en bragas. Comencé a dar pequeños besos en la tela y sentí su clítoris, sentí su humedad que yo ya estaba por llegar al clímax.
Fui hasta sus labios, los besé tiernamente y volví a bajar, le quité su última prenda con los dientes. Di besos en sus entrepiernas, tratando de jugar con ella, gritó

-Hazlo de una puta vez Florencia-

-Si usted desea, profesora.

Comencé a besar su centro, estaba tan humedo que succione su clítoris, jugué con él, lo mordi, lo chupe, rocé mi lengua completamente en su feminidad. Introduje nuevamente mi lengua en su vagina. Ahora si, introduje dos de mis dedos en ella, gemia de tal manera que me hacía salir de mis pensamientos y centrarme en ella y el momento. Llegó al orgasmo y chupe mis dedos. Llevé mis labios a los suyos para que pudiera recomponerse, le faltaba el aire.

Unos golpes de la puerta se oían, era el chico haciéndonos saber que debíamos salir  pero ¿Cuánto tiempo pasó? Me dejó con ganas.

-Debemos salir...-dije con un tono indiferente-...tengo miedo de lo que puede pasar, de lo que opinarán y si sabrán que hicimos.

-Flor, estamos al otro lado de la ciudad, nadie nos conoce. Excepto que hayas traído a alguien del colegio.-comenzó a vestirse.

-Si, es verdad.

-Mañana nos vemos...-abrió una de las puertas que la llevaban al otro lado-...Esto no quedará así.

Comencé a vestirme y traía una enorme sonrisa la cual no podía quitarme. Debía buscarla durante la fiesta sin que Vero se entere. ¡VERO! ¿Qué estará pensando?, ahora he sacado mis propias conclusiones.
La manera que se ponía cada vez que jazmín se nos acercaba era rara. Cuando me estaba por contar y calló porque nos escuchó. Hace rato que me dijo "suerte", era porque le molestaba, ahora entiendo todo, gusta de la profesora, como yo.