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_ Vamos Angi. _la ánimo ofreciéndole su mano para ayudarla a levantarse._ Eres fuerte pequeña, solo debes confiar en ti misma.

_ Ya, pero es duro. _dijo limpiándose el sudor que le caía de la frente._

_ Te recuerdo que me lo pediste tu. _sonrio divertido._

_ Lo sé, pero comienzo a pensar que no valgo para esto. _murmuro quitándose los guantes de boxeo._

_ Pues claro que no. _lo miro confundida, ella esperaba que la animase._ Amor eres buena persona, cariñosa y dulce, pura e inocente, tu eres la mejor de los dos y lo que te hace ser fuerte no esto, es ser tu misma.

_ Pero eso no evitará que ocurra algo como lo de Logan.

_ Claro que si Angi, fuiste tú quien se puso delante de la pistola sin dudarlo ni un segundo para protegerme y aunque preferiría que no lo hubieras hecho, seguiste tu corazon y no hay mayor fortaleza que esa. _dijo haciéndola esbozar una sonrisa preciosa para el cazador._

_ ¿Por que siempre sabes que decir, para hacerme feliz?

_ Porque tu felicidad es lo que más me importa. _dijo acercándose a ella, pero fue la chica quién terminó cortando las distancias besándolo con todo su corazón._ ¡Dios! Como te quiero preciosa.

Ella río y volvió a besarle, y lo que empezó como una sesión de entrenamiento se convirtió en demostraciones de cuando se querían mediante besos que parecían no terminar nunca.

_ Pensé que estábamos aquí para entrenar.

_ Tu has comenzado, no me pides que termine ahora. _la hablo con su voz ronca que consiguió derretir-la en segundos._ Además ya te he enseñado lo básico, serás capaz de defenderte, eso si, dudo que puedas ponerlo en práctica, porque jamás voy a dejar que nadie te haga daño nunca más.

_ Lo sé, eres mi ángelito después de todo. _lo beso._ Y siempre estás allí para mí.

_ ¡Rubita es hora de que te marches a trabajar! _la aviso Merle desde lo alto de las escaleras para después desaparecer de nuevo del alcance de sus ojos._

Y es que a raíz de la pesadilla que tuvo Angi, ella le pidió a su novio que la enseñará algunos movimientos básicos de pelea y aunque Daryl al principio no estaba muy seguro de hacerlo ya que podía lastimarla en un descuido, termino cediendo a las súplicas de su chica que sabía cómo hacerle cambiar de idea y por ello se levantaron de madrugada para comenzar con la primera sesión en el sótano que había en la casa de los Dixon y que hasta ahora Angi no había visto, según Daryl no le gustaba bajar allí porque era un sitio muy pequeño y oscuro, pero el principal motivo era que su pequeña se pudiera sentir incómoda en ese lugar, al haber estado retenida en uno parecido en el refugio del bosque de Logan, pero ella no parecía que aquello le hubiese dejado secuelas, después de todo tenía a Daryl y con él siempre se sentía segura y protegida.

_ Parece que se nos acabó el tiempo. _dijo en un suspiro._

_ ¿De verdad tienes que irte? _pregunto en un puchero el cazador._

_ Si ángelito, ya falte un día y no puedo volver a hacerlo si quiero conservar mi trabajo. _hablo sin romper la manera en la que habían estado antes de que Merle la avisara._

_ ¿Sabes? Ahora que he conseguido un trabajo, no tienes porque ir a trabajar y podrías estar más tiempo conmigo.

_ Daryl aunque me encantaría estar todo las horas del día a tu lado, me gusta mi trabajo. _lo miro para hacerle entender._ Se que no quiero ser camarera toda mi vida, pero mientras tanto disfrutaré de ello, con Mia, hasta que llegue el momento en que pueda dedicarme a lo que quiero ser.

La mejor parte de mi. (Daryl Dixon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora