Los días pasan silentes como niños ocultos en la madrugada para no despertar a sus padres
Se escapan tan de prisa como adolescentes rebeldes en busca de su libertad
De suspiros se llena mi alcoba y se ahogan en el silencio de esta cama tan vacíaSolito me ando despertando cada mañana y poco a poco se pierde el sentido que tiene la vida
El miedo se vuelve un gigante que destruye todo a su paso
Ya no tengo ni lágrimas para llorarte y mucho menos tiempo para esperarte así que Escribo estas postales nocturnas Pensándote y preguntándome si es posible extrañar tanto a alguien que nunca he conocido.