Amor real y virtual (Kirito y tú)

Miradas extrañamente maravillosas.

____.

-Lo lamento, no vi por donde... -Se escucha una voz femenina muy conocida- u-uh

-N-no lo malinterpretes, Asuna -Me intento explicar.

-Me hiciste caer por accidente y caí sobre ___. N-no pasó nada extraño, de veras -Se explica Kazuto- Confía en mi -Dice con una algo de ternura mientras se levanta.

Y una punzada en mi pecho apareció, no sé qué pasa, pero, duele. Duele mucho que le diga eso con ese tono tan dulce. Debería alegrarme por tal escena, pero me duele.

-Confío en ti, Kirito -Lo abraza y le da un beso en la comisura de los labios- En ti también, ____ -Me sonríe dulcemente-

Y eso me causa otra punzada más.

-Creo que voy a ir a la biblioteca -Intento sonreír- Los dejo solos.

Me retiro, mordiéndome mi labio inferior. Estoy muy incomoda viéndolos así.

Siento la mirada de Kirito sobre mi. Miro de reojo ya desde lejos y mi sospecha era cierta. Él me miraba.

Salí corriendo de allí. Fui a dónde supuestamente era la biblioteca. No tengo ni idea de dónde es.

Llegué allí y había una señora mayor sentada en una silla. Tenía arrugas y unas canas sobre su pelo.

Miro alrededor y hay millones de libros. Algunas telarañas y polvo. El lugar es amplio. Me gusta este lugar

-¿Qué se le ofrece, señorita? -Me pregunta la señora-

-Oh, solo vine por el libro de informática de nivel superior.

-¿Superior? Vaya, en mis tiempos nadie todos eran cómo tú. Ahora no muchos vienen aquí -Señala a nuestro alrededor y veo que está vacío- Bueno, nadie viene aquí desde hace tiempo. Todos están con la tecnología, y se olvidaron de los libros.

-Bueno, creo que es un buen lugar para buscar información y tener una gran charla con una buena señora -Sonrío amablemente.

-Soy Nora -Extiende su mano para que la estreche.

-Soy ___ -Estrecho mi mano con la de ella.

-Sígueme. Por aquí está tu libro -Nora me guía hacia un estante grande, era uno de los que parecían mucho más recientes.

-Es ese -Tomo el libro- Muchas gracias por su ayuda, luego lo devolveré a su lugar. Lo prometo.

-Claro, querida. Vuelve cuando quieras, es muy solitario aquí -Sonríe con tristeza.

-Se lo aseguro, vendré seguido -Le devuelvo la sonrisa con más alegría.

Nora me guía hasta la salida. Es una persona muy amable, y eso que apenas la conocí. Ojalá seamos buenas amigas.

Seguimos caminando, ya qué, la biblioteca es muy grande. Pasé cerca de un área donde era algo más oscura que las demás, apenas se veía un rayo de luz que supongo que es de una ventana. Varios libros de distintos tamaños estaban ahí, parecían viejos.

Aunque... Las apariencias engañan.

Me dirijo a ese lugar y Nora al percatarse de mi acción, me impide el paso.

-Lo lamento, no puedo dejarte pasar por allí.

-Lo siento, es que, tengo curiosidad de ese lugar -Respondo con sinceridad mientras abrazo al libro de informática.