Después (post Jurassic World Fallen Kingdom)

El plan

               La noche olía a tierra mojada, fuego y miedo. Blue se volvió una vez mas hacia Owen y sus pupilas extrañas se despidieron con cautela. Sus pasos salvajes levantaron una sutil capa de polvo y de alguna manera anticipaban el futuro que se había desatado en el preciso momento en que Masie Lokwood oprimió el botón para liberar a los dinosaurios.

                La pequeña niña corrió hacia Owen y lo abrazo, afirmando con el gesto una empatía y un reflejo de necesidad. Claire bajo lentamente la escalera y se sumo al abrazo, entrelazando sus dedos con los de Owen.

                Zia sintió un nudo en la garganta cuando la oscuridad devoro la figura imponente de Blue. Algo de su vida le pertenecía al haberla salvado y tenia una mezcla de miedo y orgullo que la hicieron patear el aire con impotencia.

                Franklin tenia los ojos casi cerrados mirando el suelo cuando comenzó a hablar con una resolución y una seguridad que todo el grupo se volvió a escucharlo con suma atención.

-Tenemos que movernos rápido. Nadie sabe que estamos aquí. Nadie sabe que fuimos y volvimos de nublar. Pero lo mas importante, nadie sabe que paso aquí.

                Claire asintió con preocupación, pero su mente había comenzado a trabajar apenas escucho los pensamientos de Franklin.

-Hay que proteger a Masie. Tiene que quedarse con nosotros – Dijo casi en un susurro al volverse hacia Owen que abrazo a la pequeña y asintió.

                Esta vez, Claire hablo con los ojos perdidos en la inmensidad de las paredes de la mansión y sus palabras no se detuvieron para tomar aire solo se hilaban conforme el plan aparecía en su cabeza. La planificación era parte de su estructura mental.

-Tenemos pocas horas para hacerlo. Como ninguno de los que participaron de la subasta va a denunciar nada a la policía corremos con horas de ventaja. Tenemos que cambiarnos, y volver a aquí y llamar a las autoridades para informar que encontramos a Masie sola. Su abuelo nos había llamado para hablar sobre el santuario y al llegar nos encontramos con toda esta devastación.

                Claire desvió la vista hacia la pequeña y con un gran esfuerzo se coloco al nivel de sus ojos. La herida en su pierna envió una corriente de dolor punzante que la obligo a brevemente a contener la respiración.

-Masie, no existe nada peor que engañar a alguien. La mentira jamás es una opción, pero si no hacemos esto. De esta forma. No vamos a poder tenerte con nosotros. Si las cosas se saben como pasaron, podemos terminar en la cárcel y, lo mas espantoso, seria que te lleven de servicios sociales.

                Masie lucho para contener las lágrimas y asintió en silencio. El miedo y la compasión impulsaron los brazos de Claire que rodearon a la pequeña de forma instintiva.

-Todo ha cambiado ahora y es necesario que te quedes a nuestro lado y esta es la única forma que se me ocurre para que eso pase.

                Claire y Masie se miraron a los ojos por un instante y la desesperación, el dolor y el medio desaparecieron por un segundo cuando ambas deslizaron unas débiles sonrisas. Owen ayudo a Claire a levantarse y esta vez el dolor de la herida hizo quebrar su voluntad. Solo pudo abrazarla y así tratar de contener un poco el sufrimiento.

-Claire hay que atender tu herida, pero para eso necesitamos ponernos en movimiento. Dijo Zia con gran resolución. Franklin comenzó a ver cual de los autos tenia el combustible suficiente y las llaves puestas para tratar de llegar a la ciudad.

-Yo tengo un cambio de ropa en mi lockler de la oficina- dijo Franklin mientras caminaba hacia Zia que afirmo lo mismo. Ambos pasaban mucho tiempo en la oficial de Protección y tenían prácticamente una parte de sus hogares allí.

-Nosotros vamos para la ciudad, ustedes?- pregunto Zia. Owen miró a Claire y ambos por unos segundos se apartaron para hablar en privado, algo que no llegaron a oír. Aun estaban abrazados. Zia miro a Franklin y murmuro algo mientras su compañero negaba con suspicacia. Maise observaba a todos con curiosidad.

                Owen sonrió con ternura ante las palabras de Claire y beso su frente antes de volver al grupo y aclarar que iba a la casa de Claire que tenia ropa allí.  Zia miro a Franklin y estiro su mano haciendo un gesto inequívoco que lo obligo a darle diez dólares. Owen los miro extrañado.

-Nunca gane diez dólares con tanta facilidad- Dijo Zia sonriente mientras caminaban hacia el auto.

 -Ustedes apostaron algo? – pregunto Owen con incredulidad.

                Franklin comenzó su camino hacia el auto rascándose la cabeza. -Yo pensé que eran solo amigos. Tengo que salir más.

                Claire sonrió con tanta frescura que Maise también comenzó a sonreír mientras la tomaba de la mano y subían al auto.

CONTINUARA….