fℓσяєѕ +Uta x ______+(+18)

03

03– Celos.

Narrador en tercera persona

—¡Perdón!, Gustavo es un idiota, y-yo -///_///-, lo siento... —miraste a otro lado... Rápidamente te separas te al ver la cercanía con Uta... Olía a hombre *-*, un olor agradable para tus fosas nasales. Lastimosamente te separaron las ganas de matar a Gustavo... ¡Como se le ocurría hacer eso al idiota!

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Dos meses después
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Los días pasaban tranquilos, _______ ya se había acostumbrado a la presencia de los cuatro ghoul que habitaban su hogar... Armando se había confesado con ella, no, no podía aceptarlo.

Su pequeño y casi destruido corazón había comenzado a sentir cosas extremadamente fuertes por Uta.

Los pequeños recuerdos inundaban su mente, Uta se parecía de cierto modo a EL.

Esa persona que fue un padre para ella, esa persona que la recogió y le dio un hogar cuando menos se lo esperaba... Esa persona la cual había sido su salvación. 

Los pequeños recuerdos azotaron su mente. El le había dado una gran riqueza, le heredo millones de dólares y también le había comprado una casa a las afueras de la ciudad.

—________, ven, es hora de cenar. —Su mejor amigo entró por la lujosa puerta de mármol. Gustavo. Desde el incidente con Armando ya no había hablado con el. Armando estaba lastimado.

—Si, gracias por avisar, oye... ¿Uta salio a cazar hoy?—El solo asintió. Reís te amargamente. —Quería sentarme a su lado hoy.

—Tranquila ángel, sabes, estoy seguro que algún día eso si pasara. —te observó a los ojos y luego sonrío tristemente. —Samanta y Irene vendrán a quedarse aquí. Armando ofreció la casa para que se quedaran aquí. Llegan hoy en la noche, creo.

Un bufido salio de tu boca. ¡como Armando podría ser su amigo!, ellas siempre intentaban molestar te. Primero que nada por que tu antes tenías ansiedad. Esos ataques de ansiedad se fueron cuando ellas no estaban.

Siempre te llamaban loca, cerda, puerca, gorda, idiota, rara, tarada... Entre otros.

Las odiaban a morir, digo odiaban por que también Gustavo, Mariana y tu las odiaban.

Sin ánimos bajas te a comer. Cuando viste a Uta tus ojos se iluminaron. Llevaba su típica ropa del anime. Habías comprado varios conjuntos cosplay.

—Uta, ¿Te quedas a comer?—El chico te volteo a ver. Sus ojos eran de un precioso tono gris. ¿Y sus ojos normales?

—Si~ Gustavo me dijo que querían que me quedara a cenar. —Con sorpresa observas te a Gustavo. Casi lo besas, pero no.

—S-si, todos queríamos que te quedaras. —Gustavo te señaló con el dedo y susurró "solo tu", tus mejillas estaban apunto de estallar.

Terminaste de bajar las escaleras. Con tranquilidad caminas a la cocina.

—Touka, y la carne de humano. —Touka señalo una bolsa. Sacas la carne y la partes en cuatro rodajas. Las cocinas asadas.