Bad Romance [Gay]

Capítulo 18.

No tenía registrado el número en mi celular, y estaba muy nervioso para revisar si era de alguien conocido.

¿Quién eres? ¿De qué hablas?

A penas y pude mandar el mensaje, siendo honesto no quería seguir dando de que hablar en la Academia, además de que no me sentía listo de ponerme un letrero en la frente que dijera GAY.

Los vi afuera de tu coche. Lo vi todo. Vas a pagarlo Samuel.

Empecé a temblar del miedo. Esto no me puede estar pasando, no quiero salir ahorita del clóset. Alexander me va a dejar de ayudar de estudiar, Dios. Miles de posibles escenarios me empezaron a bombardear y cada uno era peor que el otro.

Por favor, haré lo que quieras, solo no le digas a nadie

Debía mantener esto secreto. Ya no quiero seguir con más problemas y chismes.

¿Lo que quiera?

Bien aquí viene. No importa que sea. Tampoco puedo sacar a Alexander del clóset.

Si, lo que quieras.

Cada vez que veía el signo de "escribiendo" en la pantalla de mi celular, puedo jurar que mi corazón se iba deteniendo.

Quiero que me dejes escogerte un outfit para la súper fiesta que tenemos babe. xo

¿Qué?

¿Damian?

Juro que si es ella....

Duh! babe, obvio me  las vas a pagar por no contarme lo de Alexander, quiero detalles eh!. Y solo tenias que decirme que no dijera nada jaja tu tranquilo, pero como ya dijiste que lo que quiera xx-

-La voy a matar.- Gruñí en voz alta, sintiendo mi corazón volviendo a su ritmo normal.

- ¿A quién vas a matar?.- Alexander entró a la camioneta y sacó de la bolsa un chocolate Coockies and Cream y le dio una gran mordida.

- Nada...- Antes de bloquear mi celular y manejar, Damian me mandó una foto dónde nos veíamos Alexander y yo viéndonos a los ojos... Nos veíamos... como una pareja- Alice, rompió unos audífonos que le presté.-

(...)

- Venga, ya, estoy harto de números. Ya vamos a jugar Mario Kart.- Ya pasaba de la media noche y finalmente había entendido contaduría.

- Mmm... Bien, pero si te gano, me debes invitar la cerveza más fría que haya.- Alexander me volteo a ver con una cara de malicia y después soltó una risa. - ¿Qué que tiene? Al el gran Alexander Rollerside ¿no le alcanza para una cerveza?.- Ya estábamos tan cansados que los dos nos pusimos unos pants muy cómodos que tenía el.

- Vamos, es la peor apuesta que hay, y si quieres voy y te compro una tienda entera.- Se escuchaba con un tono malicioso, y la mirada que tenía te penetraba el alma hasta sentir escalofríos, era demasiado sexy.

- ¿Entonces que apostamos? ¿Qué es lo que el gran Alexander tiene ganas de perder?.-

- Ya veremos, algo se me ocurrirá cuando pierdas.- Me sonrió y prendió la consola. Pobre tonto, no sabe que muy en el fondo soy un competitivo hijo de puta.

(...)

- Oye y se que sonará extraño pero... ¿Qué dijo Max de lo que  pasó  cuando me fui?.- Estábamos empatados y primero muerto a dejar este cabeza de biceps ganarme. No me iba a distraer.