Mi Corazón También Lo Siente.

Percances Menores.

—¿Dices que el dolor fue repentino? —cuestionó la enfermera, de aproximadamente 30 años.

—Si, pero son normales, solo necesito una "Aspirina" o algo para no estar en mi primer día de clases así. —dije como si supiera del tema.

Me tomé la pastilla que quien sabe que rayos era, pero me alivió muy pronto.

—Mi amigo... —señalé a James. —se cayó de la nada mientras veníamos aquí. ¿Cree que sea algo?

Me preocupaba por James, no era normal verlo así. Él solo pasaba la mano por la nuca y fingía voltear a una ventana.

—No es nada, en serio Luke. Mejor vamos ya a clases, que creo que vamos un poco tarde.

Me negué un poco, pero al final asentí. Agradecí a la enfermera y nos retiramos.

—¿No es nada? ¿En serio? —pregunté mientras caminábamos por el pasillo y tomábamos el ascensor.

—Si, yo tampoco hago mucho ejercicio, eso debe ser, solo nesesito estar en forma. —contestó.

El elevador se detuvo y la puerta se abría.

—¿Tú? ¿Más en forma? Creo que no es posible. —dije sonriente.

—Lo mío es solo cuestión de ejercicio, a ti te toca la visita al médico.

Asentí.

—Creo que van un poco tarde a mi clase. —se oyó una voz detrás de nosotros.

Ambos volteamos, un poco asustados.

Un hombre bien vestido, un poco corpulento, de un cabello en forma pero de un negro perdido. Llevaba un portafolio café.

—Clase B, primer año, ¿No?

—Si, ¿Es usted el profesor...? —James anticipó.

—Arthur Fisher, el profesor Fisher. Veo que ustedes dos se planeaban saltar mi clase, ¿No es verdad?

—No, de hecho, regresamos de la enfe...

—¡No importa! Me agradan, así que siganme, que los tres llevamos 10 minutos encima. —me interrumpió.

Entramos al salon, pude notar la cara de angustia de Michelle. Estaba preocupada.

Camine torpemente a mi silla; estaba mareado por la pastilla.

—¿Donde se habían metido? —dijo Michelle mientras se ponía de pie para saludar al profesor de Filosofia.

—¿Que esperabas? La enfermería esta dos pisos más abajo. —contestó James, un tanto... ¿Grosero?

El resto de la clase transcurrió con normalidad. James y yo estábamos más cansados que los demás.

—Oí que el cine estrena Bajo La Misma Estrella ¿Qué tal si vamos más tarde? —comentó Michelle, mientras bajábamos las escaleras para salir del edificio.

—¡Claro! —afirmó James. —¿Nos acompañas Luke?

—Si Luke, sería buena forma de empezar a retomar nuestra amistad.

Afirme.

¿Recordaba nuestra amistad? 

Estaba molesto, pero no sabia porqué. Creo que el hecho de que James pasase más tiempo con Michelle me afectaría bastante. Él y yo hacíamos todo juntos.

Pasé por James y él me dirigió a la nueva casa de Michelle. Al menos yo los llevaría, él iba a pagar las entradas.

—¡Guapísimos! —comentó mientras entraba al coche. —Pero más tú, mi amor.