Dulce Venganza

El gato te comió la lengua II

           

RENUNCIA A DERECHOS:

Highschool DxD no me pertenece a mí sino a Ichiei Ishibumi

Personajes hablando: —Slifer—

Personajes prensando: (Es buena idea)

 

Hologramas y seres sellados: [Te apoyo compañero]

 

Capítulo 11: El gato te comió la lengua II

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6 horas después

—Tsk, maldita sea no puedo romperlas, ¿Tu pudiste Shirone-nya?—

—No, son muy resistentes y puedo sentir como drenan nuestra magia— analizaba Koneko al sentir como sus reservas mágicas descendían y su fuerza se debilitaba

—Esto es malo-nya, tenemos que salir de aquí y advertir a los demás, también hay que rescatar a Irina— forcejeaba Kuroka y es que ella y su hermana llevaban horas intentando romper las ataduras, un esfuerzo que inicio desde que los guardias las encerraron en un cuarto sin ventanas y con solo unos focos que iluminan la habitación, ellas estaba sentadas en sillas de madera, sus manos y pies estaba sujetas con barrotes de color azul y unos símbolos dando a entender que eso era lo que les drenaba su magia

CLICK

Las 2 escucharon como la puerta de la habitación se abría

Pisada

Pisada

—Espero que no esté dormidas todavía— el Kuroi Senko hacia acto de presencia, las hermanas pudieron ver que se estaba limpiando sus manos con un pañuelo que se torneo en rojo delatando que era sangre lo que se limpiaba —Espero que no hayan tenido que esperar mucho, pero es que andaba ocupado con sus soldados— se rio por lo bajo

—Qu-que les hiciste— Koneko pregunto

—No te gustaría saber, después de todo eres muy pequeña para estas cosas jajajaja, solo digamos que tengo muchos ojos, lenguas y rejas para donaciones— hablo riéndose de las caras de asco de las hermanas —Pero bueno, dejemos eso de lado y pasemos a lo entretenido, quien quiere ser mi siguiente juguete, vamos no sean tímidas—

—Estás enfermo-nya—

—Saben, no sé porque siempre las personas presas insultan a sus captores, es como si sintieran que con insultarlos las dejaran libres, ¿No les parece curioso?— decía mientras sujetaba la silla de Koneko y la colocaba enfrente de su hermana con una distancia de unos 3 metros, en medio de ellas una mesa con varias herramientas quirúrgicas

—Déjanos ir—

—Y dale con pedir lo imposible, ¿De verdad creen que por decirme que las suelte las dejare libres?, ¿Realmente eso funciona?— sus manos recorrían las herramientas como si pensara cual usar

—Dime Kuroka, ¿Qué tanto soportas el dolor?— la aludida solo gruñía —Dicen que los gatos tienen 7 vidas ¿Sera cierto eso?— su boca pronuncio un hechizo lo cual causo que sus facciones nekomatas aparecieran

—¿Cómo?— Koneko se pregunto al ver su cola

—Es curioso ver como sus facciones reaccionan ante sus sentimientos, este hechizo causo que ciertos nervios sensoriales captaran una señal lo que causo que sus colas y orejas saliera— explico sencillamente