MAN OF THE WORLD - jimsu

Parte 23

— buenos días tía, hola jimin, veo que hacen el desayuno — se sentó en la mesa mientras seguíamos nosotros con los que haceres.

— claro que si yoongi, ¿Dónde esta Woo? Ya vamos a desayunar — dijo Yun.

— mi madre esta bañándose, me dijo que cuando acabara vendría a comer — menciono' suga aun sonriendo.

— esta bien por mientras lávate las manos jimin, hay que servir el manduguk — hice caso a lo que me dijo, mientras yoongi limpiaba la mesa.

Por fin se hizo presente la señora Min, y después de algunos buenos días, nos dedicamos a comer.

A las 11 de la mañana, por fin llegaron los familiares de suga, eran alrededor de 6 personas las que se centraron en la sala. Todos volvieron la mirada a yoongi una vez que lo lleve hacia ellos. Definitivamente era una familia unida porque todos ellos se acercaron para abrazarlo.

"estamos felices de verte de nuevo", "suga estas irreconocible", "eres mas guapo de lo que recordaba", "te extrañe mucho", "es una alegría el verte de nuevo con tu familia, aquí es donde te amamos", "no nos vuelvas a asustar", "te queremos".

Entre abrazos y llantos, la sala poco a poco se fue de nuevo quedando vacía. Algunos familiares se despidieron para volver a sus casas prometiendo que en los siguientes días irían a ver al señor Min y pasarían a visitarnos, otros se quedaron a dormir, para reponer las noches en que se habían quedado velando con la señora Min. La razón, muy simple era "el funeral de yoongi", al no tener en si un cuerpo a quien velar, la señora Min estaba indecisa si hacer un funeral era lo mas correcto, aun no quería creer que ya no vería a su hijo.

Sus conocidos le decían que ya no había esperanzas, así que en estas fechas comenzaron a orar por yoongi, sin embargo aun yo no conozco quien fue el que les dijo tal cosa.

Alrededor de las 12, yoongi y yo teníamos tiempo libre.

— jimin, ¿puedo hablar contigo? — asentí y nos dirigimos hacia el patio para sentarnos a solas, creo que el asunto era importante al ver la cara seria que puso el.

— ¿Qué sucede? — pregunte sentándome en el piso de madera.

— platique en la mañana con mi mama — respondió — hace algunos meses, después que vinieras, llego un chico el cual no conocen mis padres, y por como lo describió mi madre me temo que yo tampoco, alguna persona mando a decirles que yo había muerto por una sobredosis, hasta les mandaron una hoja de periódico en el cual mis pertenencias aparecían—

— ¿tienes el periódico? — pregunte.

— si, aquí esta — dijo yoongi, mostrándome un pedazo de periódico, en efecto, en la escena se encontraba una fotografía de su graduación. Al parecer el tipo se parecía a suga y lo más raro es que murió en el mismo departamento de suga cuando vivía con hoseok.

— ¿Cuándo vino aquel sujeto? — pregunte

— a principios de febrero —

Mire sorprendido a suga, eran las mismas fechas que el juicio contra hoseok. "Hoseok" pensé.

— se lo que piensas jimin — hablo suga — pero no llegues a conclusiones aun, pudo ser cualquier otra persona quien haya mandado este mensaje a mis padres —

— suga, no me digas que lo defenderás, él te hizo cosas detestables... —

— ¿crees que no lo recuerdo?, apenas estoy superando todo el pasado, pero hoseok no lo pudo hacer estaba en la cárcel — respondió.

— ¡pudo haber contratado a alguien, a un amigo! —

— ... el no haría algo así —

— ¡¿Por qué sigues defendiéndolo?! —

— ¡no quiero creerlo! — suga se levanto en ese instante.

No podía creer lo que suga me estaba diciendo, hace pocas horas el estaba sufriendo por sus padres, aquellos que obviamente fueron engañados por hoseok. No se como lo hizo y la verdad me importa un pepino, pero sabia que el fue el culpable.

Ambos estábamos con los nervios a flor de piel. Ambos manteníamos nuestras miradas y ninguno se atrevía a hablar. Suga se recupero y sin más volvió a entrar a su casa.

Yo no quería entrar, no estaba seguro de que hacer. Seguí en el patio, supongo que una hora. No podía estar afuera todo el día pero tampoco entrar. Definitivamente si suga quería seguir pensando eso, yo le haría cambiar de parecer.

No se que me poseyó para tomar mis llaves y dirigirme a seul, para ser exactos el centro de apoyo a adicciones, solo tarde 3 horas en llegar.

Llegue como una visita a hoseok, mostré mi identificación y también mi tarjeta de presentación. Todo estaba en regla para que me permitieran ver a hoseok. Me llevaron a una sala que daba a un jardín enorme en la cual se encontraban enfermeras y algunos pacientes, esto no era una cárcel, era un centro de ayuda, por lo que todo a mí alrededor era cómodo.

Me quede parado mirando las paredes que tenían el característico azul cielo, todos los pacientes se encontraban con sus uniformes azules y con sus respectivas enfermeras vigilándolos o ayudándolos en actividades que apoyaban su desarrollo. Hoseok vivía en tranquilidad y eso me molestaba.

Me molestaba el hecho que aun siendo la cruel persona que hizo sufrir a la persona que amo, este en la actualidad en un lugar cómodo, comiendo tres veces al día, no preocupándose de las consecuencias que sus actos hacen y harán a las personas que el alguna vez conoció o que tal vez ni recuerda. Me molesta el solo hecho de que suga siga preocupándose y defendiéndolo. Me molesta el solo hecho de que suga lo siga queriendo.

— señor Park — una enfermera rompe con mis pensamientos y me dirijo a ella educadamente.

— buenas tardes, si soy el — respondo.

— Park, es un gusto volver a verte — oí la voz de hoseok. Él se encontraba atrás de aquella enfermera.

— los dejare solos — musito la enfermera, ella creí que aquel ser era mi amigo, que equivocada estaba.