Capitulo 3

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El concierto estuvo cargado de adrenalina, Liam no llevaba camisa y golpeaba con sus palillos tan fuerte como podía, estaba cargado de liquido ilegal corriendo por sus venas al igual que cada uno de ellos, ¿Qué mejor forma de hacerlo?

Louis había disfrutado, amaba la sensación y los gritos, la adrenalina y el ruido, adoraba cada cosa, solo por el pequeño detalle de la incomodidad que Harry le había dejado con ese gran propósito, pero no le importo demasiado, ni siquiera ya estaba enojado con él, se podría decir que siempre se dejaba caer de nuevo en la misma red.

Louis completamente amaba a Harry en el escenario, el amaba como se movía de aquí allá, como se tiraba al suelo y dejaba todo allí, como se mordía su labio y cerraba los ojos dejando que la música de los instrumentos fluyera, sus manos de movían con el micrófono en ellas y hacían movimientos que Louis adoraba desde cualquier punto, adoraba como terminaba deshaciéndose de su camisa y lanzándola al público, y siempre sin falta, en su última canción mientras Niall hacia su solo de guitarra en el suelo él se colocaba detrás de él y dejaba caer su rostro en su cuello y se movía al compas de Louis con la música mientras Louis tiraba su cabeza hacia atrás y se dejaba sentir. Al momento del coro compartían micrófono y al acabar la canción Harry le miraba fijamente, se mordía el labio tropezando un poco con el metal en este y le besaba con fuerza mientras la multitud explotaba, y las luces se iban, terminando el beso. Todos sin excepción amaban su show sin interrupciones o algún inconveniente que alguno causara, bueno, hay que obviar que es Harry en su mayoría y una que otra vez Zayn o Niall, pero Louis siempre se mantenía en su lugar cuando debía, el iba al centro del escenario cuando se lo pedían, o bajaba de él solo para bailar frente a los fans, pero algo que Louis nunca hacia era tocarles, jamás firmaba autógrafos y muy pocas veces se permitía tomarse fotos con ellos, Louis no hacia esas cosas muy seguido, su mente era mucho más diferente que la de ellos, hacer eso para el significaba bajar un poco de nivel y por Jesús que Louis Tomlinson nunca se permite aquella barbaridad, jamás.

También era genial cuando chocaban espalda con Niall cuando movían sus cabezas al mismo tiempo cuando les tocaba ir al centro del escenario y su cabello bailaba ante ellos en cada movimiento brusco al compas de la música, Liam siempre se lucia en sus solos y nadie nunca lo había visto equivocarse, el muchas veces dejaba a Zayn sentarse en sus piernas y cantar mientras el tocaba, impresionante que ninguno de los dos se equivocara.

Pero Louis siempre presumía, ellos eran perfectos, de pies a cabeza, cada cosa en el escenario era fantástica y podía haber un show que la prensa y periódicos dejaran a un lado, porque ellos simplemente eran maravillosos en su trabajo.

Aunque nunca Louis dejaría atrás aquella vez que Harry y Zayn jugaron demasiado con fuego. Si, estaban drogados. Si, había mucha adrenalina. Si, estaban demasiado cerca y sus pechos chocaban al cantar, pero no había necesidad de besarse, no había necesidad de que Harry usara su lengua, y no es como si Louis no se hubiera besado con Zayn o con Liam, sino que era algo demasiado publico, Liam estuvo muy enojado y durante un tiempo solo tomaba a Louis del brazo y se iban a algún bar, alejados de ese par de idiotas que se lamentaron un buen tiempo, y desde ese momento la gente espera demasiado de sus conciertos, ellos jamás pueden detenerse de perseguirles a donde vayan. Si, su música era bastante buena, pero que prensa, que periódico, radio o televisión no adora un poco de drama, y ellos eran el drama con pantalones de cuero ajustados y muchos tatuajes, Louis insistía y todos le apoyaban, eran irresistibles.

Luego del concierto fueron a una gran fiesta que organizaron en su casa, botellas aquí y allá, humo aquí y allá, personas donde quiera, hasta había un chico en su techo con una botella a la mitad bailando solo, eso era lo que amaban, amaban su propio caos.

PARALELO |LARRY STYLINSON|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora