Eyes That Confuse ↪윤민

Capítulo 2

Mientras las gotas de aquella lluvia que parecían caer junto con el sufrimiento de aquel chico, parecían ser la tempestad más triste que había visto en su vida, por lo menos así ocultaba las lagrimas que salían de forma bestial de sus ojos sin intenciones de parar.

Cuando pensó que ese era el fin de su vida no se sintió tal mal, pensaba que así era la mejor forma de deshacerse del monstruo que era y ponerle de una vez fin a su dolorosa vida, agonizando hasta que lo hallara la policía.

Pero de repente aquella mano puesta en su hombro derecho le cambiaría la horrible y despreciable vida que llevaba.

—Lo siento mamá, lo siento hermano —Susurre tan bajo que solo fue perceptible para mí, hundiéndome en la culpabilidad no me percate que alguien estaba atrás mío hasta que sentí un mano bastante larga y suave colocarse en mi hombro dándome una palmada para que volteara a ver el causante de eso.

—¿Necesitas ayuda supongo? —Una voz ronca resonó en todos mis sentidos transfiriéndome algo de tranquilidad —. Vaya sí que te han dado una buena paliza, quieres qu...

Esa fue la ultima palabra que logré escuchar claramente ya que sentí como perdía la conciencia por todos los sentimientos acumulados en tan solo unos instantes atrás, aparte de que mi condición no era la mejor y solo caí cerrando mis ojos sin poner alguna retención por mantenerme despierto, solo pude ver los ojos preocupados por aquel chico que me había ofrecido ayuda.

—Señora su testimonio no concuerda con el de sus vecinos —Dijo firmemente el oficial que se encontraba entrevistándola en la sala de la casa.

—Es cierto, acaso los vecinos estaban acá, solo son personas que les encanta el chisme y distorsionar los sucesos —Sin ningún titubeo contesto la señora Park, mostrando una mirada fría sin compasión alguna.

—Entonces me está diciendo que usted apuñalo a su hijo —Enfatizó las últimas cinco palabras golpeando la pequeña libreta que sostenía con la pluma —. Porque perdió el control al verlo despierto a esas horas y este al alzarle la voz y retarla ¿Lo apuñalo?

—Eso es correcto —Contestó.

—Y su otro hijo salió corriendo a ver la escena por miedo a que le hiciera lo mismo —Encorvo su espalda para recargar sus brazos en su pierna entrelazando sus dedos —. No sé si se está burlando de mí, pero ¿Usted piensa que le he de creer?

—¿Y por qué no? —Atacó sin dudar, tan segura en sus palabras que a cualquier persona le provocaría escalofríos.

—Señora Park es obvio que usted dice todo eso para defender a su hijo —El oficia se paró, al parecer su paciencia se estaba acabando —. Si eso fuera verdad usted no estaría aquí, estaría allá fuera tratando de escabullirse de la ley y no acá.

—Pues se equivoca, soy una mujer de ley —De igual manera se levantó para dirigirse al oficial.

—Los vecinos nos informaron que vieron a su hijo Park Jimin correr con varias heridas en su cuerpo y sus manos estaban manchadas de sangre —Aclaro acercándose a la puerta pretendiendo dejar ya muy en claro cuáles eran sus intenciones.

—Sí me disculpa tengo ropa que recoger así que me disculpo, pero estoy perdiendo mi valioso tiempo con usted así que retírese junto con todas sus patrullas inútiles —Se aproximo a la puerta —. Y si los vecinos fueron los que lo llamaron anoche entonces vaya con ellos a quitarles su tiempo que da igual porque a ellos les sobra el tiempo y lo que les falta es una vida para que dejen de meterse en la de los demás así que con su permiso —Finalmente le cierra la puerta en el rostro sin inmutarse por hacer tal acto irrespetuoso ante un oficial.