SeokJin's Happiness Theory

Parte única.

Era una agradable tarde de mayo, donde Jin esperaba junto a su padre en la puerta a su madre, quien llegaría con dos nuevos integrantes para su familia.
-Serás ahora un hermano mayor, Jin.
Mencionó su papá mientras veía el auto de su madre aparcando en frente.
El cataño fue a abrir la puerta y salieron dos jóvenes y con la cabeza gacha.
—Son Kim TaeHyung y Jung HoSeok.
Menciono la madre sonriente.
—Soy SeokJin y ¡seré su hermano mayor! Dijo sonriendo mirando detalladamente a cada uno viendo sus peculiares ojos hasta que Hoseok se cubrió la mirada —Por favor, no nos mires, somos unos mounstros...
El mayor de los tres inmediatamente le tomó la mano para que lo viera y sonrió —Claro que no, venga ¡Vamos dentro!
Los dos mas jovenes se miraron entre si y siguieron a Jin hacia su nuevo hogar.
Los señores de la casa intercambiaron miradas y solo sonrieron al ver el entusiasmo de Jin para que los chicos nuevos se adaptaran.
Los días pasaban y el castaño pensaba en como poder hacer que se diviertan mientras el actuaba como un hermano mayor, hasta que se le ocurrió algo interesante, llamo al par jóvenes de ojos rojos.
—¿Por que sus ojos son así? - soltó de repente el mayor mientras traía unos vasos con jugo.
—Sólo un día aparecieron... - mencionó TaeHyung de repente mirando a Jin y después desvío la mirada. —Somos peligrosos.
  Dijo sin más.
—¡Claro que no! ¿Porqué piensas eso? - señaló a ambos—El color rojo es el color de los héroes, ¡y nosotros lo seremos!- Se levantó y fue por su bufanda roja —Puedo no tener sus ojos, pero podré tener ésto por igual.
TaeHyung y HoSeok se miraron entre si y sonrieron. —¡Es más! -puso las manos en su cintura y ladeo un poco su cabeza,  —Tae, tu serás V, HoSeok sera J-Hope, esos serán sus nombres de héroes
Seokjin anunció sin mas y empezó a correr por los pasillos de la casa a lo que los dos jovenes lo siguieron entre risas.
TaeHyung se detuvo en la puerta del estudio de su padre y miro entre el espacio del marco y la puerta intentando ver que escondía su padre, sin embargo SeokJin lo sostuvo del hombro haciendo que este girase para ver que el más alto negaba con la cabeza.
—¿¡Chicos que hacen!? mamá nos habla para cenar- HoSeok habló por el otro lado del pasillo.
—Vamos, V- SeokJin le guiñó el ojo con una sonrisa, y le dejó el paso, a lo que este se fue dejando a Jin solo, mirando la ranura de la puerta hasta que decidió cerrarla e ir a cenar.

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Los meses pasaron hasta que llegó los calurosos días de agosto.
Jin había regresado pronto de sus clases extra culpa de haber reprobado aquellas materias que su amigo NamJoon le replicaban que eran sencillas. Sin embargo ChanYeol - el cual formaba parte de las clases para chicos especiales junto a otra jóven en tutela de su padre- le ayudaba con los temas que le dificultaban.
—Ya estoy en casa, ¿Hay alguien? - dijo en cuanto abrió la puerta y al no recibir respuesta suspiro, al parecer sus hermanos aún no llegaban de su festival escolar, y sus padres estaban en un viaje de trabajo por lo que estaba sólo.
Cuando fue a dejar sus cosas el teléfono de su casa comenzó a sonar por lo cual fue a contestar.
—Habla Kim Seokjin- musito levemente.
—¿Familiar de Kim Ro? -El muchacho se limitó a dar una respuesta afirmativa.
—Lamento informarle que la señora Kim Ro ha fallecido en un accidente.

A SeokJin le costó asimilarlo, le informaron que enviarían las cenizas para que pudieran hacerle su velorio y colgó, dejando escapar algunas lágrimas traicioneras. ¿Cómo le diría a TaeHyung y a HoSeok? ¿Su padre sabría? Sólo se dispuso a llorar recargado en la pared del recibidor cuestionándose mil y un factores para que su madre falleciera.
Escuchó la puerta abrirse y vió a sus hermanos sonrientes platicando entre ellos hasta que lo vieron.
—Jinnie ¿Pasó algo? ¿Te lastimaste o te hicieron algo? - mencionó HoSeok acercándose al mayor mientras él solo se agarraba a llorar mas fuerte por lo que se dejó abrazar por ambos chicos.
—Todo está bien Jinnie... Estamos aquí... - musitó TaeHyung acariciando su cabello.
Esperaron unos minutos hasta que se tranquilizara, prepararon una taza de té para cada uno y se sentaron en la sala. Los dos chicos frente a SeokJin y un silencio algo incómodo, escuchandose solo las manecillas del reloj.
—Recibí una llamada cuando llegué a casa... - dijo Jin algo tenue para no desbordar al llanto otra vez, apretando un poco la taza en sus manos.
—Era una llamada del trabajo de mamá... Hablaron para avisar que había fallecido en un accidente. -
Alzó un poco la mirada para ver a sus hermanitos mordiendo su labio para no llorar, sin embargo ver sus ojos acuosos hizo dejar la taza y acercarse a ellos para abrazarlos y dejar que se desahogaran.
El día del velatorio de su madre llovió fuerte, como si el mundo lamentara su muerte. Desde ese entonces nadie era igual.