Eternal Sunshine →« Omegaverse YM»←

❝ C i n c o ❞

Abrió los ojos y lo primero que vio fue una pared blanca y los mismos sonidos extraños seguían resonando, su cabeza dolía como si miles de elefantes hubieran pasado sobre ella.

Fuera de la ventana se podía notar un nuevo amanecer, no podía creer haber dormido toda la tarde y noche. Pero se sentía muy bien, el dolor seguía ahí pero era un poco más soportable.

Aún mantenía un vago recuerdo de la discusión que tuvo con su padre y hermano, era difícil aceptar que aún después de tantos años habían llegado a su vida de golpe.

Esa mañana despertó con un sentimiento de culpa por haberlo tratado de esa manera pero que mas podía hacer, le dolía tanto lo que estaban haciendo. Porque tenían que aparece justo ahora, porque debía soportar tanto dolor por culpa de otras personas.

Estaba lastimado tanto físicamente como emocionalmente. Todo lo que en algún momento creyó merecido nunca había sido así, todo parecía ir en contra de él. La única persona que había logrado hacer que su corazón tuviera una gota de esperanza era aquel chico que había conocido días antes en la universidad.

El había decidido estudiar en la escuela de medicina porque quería ayudar a las personas, eso sonaba un poco hipócrita ya que ni siquiera podía ayudarse a sí mismo pero él quería ser el apoyo de otra persona, por eso había decidido que en cuanto se graduará como medico se especializaría en psiquiatría infanto-juvenil. Tal vez no sea una especialidad muy común pero era lo que quería hacer.

— Lamento molestarlo, pero debo cambiar su bolsa de suero. — Jimin solo asintió. Seguía a la chica por la habitación hasta que otro chico llegó, su corazón comenzó a sentirse vivo de nuevo y la máquina que se encontraba a su izquierda comenzó a intensificar sus pitidos. — ¿Se encuentra bien? ¿Necesita que llame al doctor Choi?

— N-no... — Susurró. Ese chico era el novio de Taehyung.

— Meri, puedes pasarme otra intravenosa, esta se aflojó. — Hablo el pálido chico, como podía olvidar esa hermosa voz, esa que la cautivaba y lo hacía tranquilizarse. — Muy bien, esto dolerá un poco. — Jimin solo asintió sin siquiera mirar el rostro de aquel chico, haciendo lo anteriormente dicho. No quería que lo viera, al parecer aún no lo había reconocido o tal vez ni lo recuerde, pero para evitar errores volteó su rostro hacia la venta donde antes pudo ver esa hermosa imagen de un cálido amanecer.

— Yoongi, ten cuidado. — Hablo la chica al ver el ceño fruncido de aquel chico postrado en cama.

— Lo siento, si te lastime. — Jimin solo asintió sin siquiera verlo a los ojos o dejar que este lo viera. Antes de que el chico pudiera volver a hablar un ruido extraño se pudo escuchar, era como el de un celular. — Me están llamando. Regreso en un par de horas para cerciorarme de sus mejoras, ¿Meri? — Llamó. El celular de Yoongi, siguió sonando hasta que se detuvo para volver a sonar otra vez, él solo frunció levemente el ceño por la desesperación de aquella persona que lo llamaba con tanta insistencia.

— Si... — Calló para darle a entender que siguiera hablando.

— Necesito que dentro de dos horas le traigan su primera comida, debe ser ligera y por favor evita algún tipo de bebida con azúcar, no queremos que se vuelva a desmayar.

— Entendido, Doctor Min. — El chico solo le sonrió.

— Deja de llamarme así, aún no lo soy además el único Doctor Min es mi abuelo, ¿entendiste? —La apunto con su dedo índice y con una mueca divertida en su rostro.

— Si, capitán.

— Muy bien, nos vemos más tarde. — Salió rápido de la habitación, algo raro hizo que su lobo se descontrolara. En realidad no tenía ninguna emergencia a lo que se pudo percatar en su teléfono, solo era su madre para preguntar si llegaría a la cena de esa noche o doblaría turno. Hoy habría una reunión en casa de sus padres con la familia del amigo de su padre. Odia ir a ese tipo de reuniones pero odiaba más tener que llegar a su departamento y preparar la cena para dos o para uno, en caso de que Jungkook le toque turno en emergencias.