Lincoln (11 años):
Tiempo personal. Eso era lo único que él pedia. Aunque nunca lo dijo abiertamente, porque sabia como reaccionaría su familia: con algún chantaje, una amenaza, o sus padres lo regañarian y lo obligarían a estar con sus hermanas. ¿Era por ser hombre que su opinión parecia no valer de nada, a menos que nadie no se le ocurriria algo para solucionar un problema? Tal vez, ya que sus padres parecían estar de lado de sus hermanas la mayoria de las veces, salvo un par de excepciones. ¿Debió ser mas fuerte para exigir sus derechos? Debe ser dificil cuando tienes muchas personas que se te irían encima. Pero ya todo está hecho. Y ya tiene el tiempo personal que queria, y no lo obtuvo de la mejor forma.
Todo empezó con la superstición de una de sus hermanas, porque no queria aceptar que perdió, acusando al albino de ser él quien le dio mala suerte. A Lincoln se le ocurrio seguirle el juego para ver si por fin podria hacer lo que quisiera, y le funcionó. Pero su idea fue tomada muy enserio y fue literalmente excluido de la familia y hechado al patio. Ya estaba arrepentido de su mentira, y confesó todo, pero no hubo caso y no le creyeron, ademas de que vendieron sus cosas. Luego trató de demostrar que no daba mala suerte, usando un traje de ardilla. Y el resultado fue peor: creyeron que el traje de ardilla era un contenedor de mala suerte.
En medio de una salida a la playa, sus padres se dieron cuenta de que Lincoln no podía vivir con un traje de ardilla el resto de su vida. No lo odiaban, pero no querian estar cerca de él por miedo. Y recordando la vez que Lori se fue a vivir al garaje, concluyeron que Lincoln debia vivir allí. No recuperaron nada de lo vendido, a excepción de su cama y colchón, y las cosas no vendidas de Lincoln como un par de juegos de su ropa habitual, su mochila y cuadernos, Bum bum, el comic que Lucy le dibujo, una guitarra rota, un muñeco de ventrilocuo, un protector genital, y una camiseta femenina. Era lo unico que Lincoln aun conservaba y era casi como empezar de cero. Lincoln solo estaba allí, recostado en su colchon y diciendo una cosa: "yo me busqué esto".
Su familia solo le dirigia la palabra para avisarle del desayuno, almuerzo, y cena. Pero no lo dejaban entrar, sino que se lo dejaban en el patio. No le hablaban casi nada la mayoria del tiempo. Nisiquiera preguntaban por sus tareas, algo que habitualmente los padres que se preocupan por sus hijos hacen. Pero eso no significaba que estaba completamente solo. Tenia aun a sus amigos, quienes siempre lo apoyarian en todo. Lincoln era tan solo un niño que no sabía lo que podian hacer sus acciones hasta que el daño ya estuviera hecho. Sin embargo, siempre ideaba planes para solucionar las cosas, aun si tenia que sacrificar algo importante. Pero esta vez, ya no podia hacer nada.
¿Que puedo hacer ahora? Era algo que se preguntaba. Por mas que lo dijera, seguirian pensando que da mala suerte. Se seguia lamentando por haber dicho esa mentira, hasta que:
-Deja de estar lamentandote y ponte de pie.-
-¡¿Quien dijo eso?!-
-¿Quien crees que fue?-
-¡AAAAHH! ¡El muñeco de Luan! ¡El coronel Galletas!-
-Ya me escuchaste hablar la otra vez. No se por que te asustas.-
-Lo siento. Hace mucho que no te escuchaba hablar.-
-Ya no importa. Como te decia, deja esa mueca de tristeza y levantate.-
-¿No sabes todo lo que pasó?-
-Si, si, te culparon de mala suerte y tu te aprovechaste y bla bla bla. Pero mira el lado positivo. Aun tienes un techo donde vivir.-
-¿Que tiene de positivo que todos te dejen solo por un tonto rumor?-
-No eres la única persona que le sucede algo asi. Pero eso no significa que te quedes encerrado llorando. ¿Acaso los heroes de los comics que lees se rindieron cuando un villano los supero? ¿Los heroes del mundo se rindieron en las batallas mas importantes de la historia? ¿Crees que me rendi cuando perdí mi brazo en la guerra de las rosquillas?-
ESTÁS LEYENDO
Mariposa blanca
FanfictionTras ser culpado de dar mala suerte, Lincoln se quedo a vivir en el garaje de la casa. Con su familia aun manteniendose alejada de él, Lincoln debera enfrentar la vida por su cuenta.