Jimin💙

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Mi nombre es Park Ji Min y cuento con 22 años de edad. Soy original de Daegu, pero actualmente me encuentro en Seúl.

Desde pequeño he tenido una vida bastante dura, por decirlo así. El dinero es algo que no me faltaba, mas tampoco me sobraba. Todo lo que tenía era solo lo necesario, nada de lujos.

Mi sueño desde muy pequeño es convertirme en idol, en ser reconocido por mi talento, pero en mi ciudad natal no podría cumplir eso. Por más que doliera, debía dejar a mi tierra, a mi familia, a mis amigos y a mi novio.

Sí, novio, soy homosexual. Me dí cuenta de eso cuando era muy pequeño. Allá en Daegu, no era cosa de otro mundo. Habían parejas homosexuales caminando tomadas de la mano o dándose muestras de afecto en muchas partes, todos lo aceptaban pues al fin y al cabo es amor. Aquí en Seúl eso es muy diferente, desde que llegué no pude evitar leer todos los carteles que mostraban su desprecio hacia la comunidad LGTB, lo que fue realmente doloroso, debido a que pensé que mi novio, Yoongi, podría venir aquí a Seúl y tener una vida mejor junto a mí; pero ahora, me doy cuenta de que eso es más que imposible.

A pesar que mi relación con YoonGi continúe, he salido con algunas chicas y chicos, pero no en busca de pareja, más bien en busca de oportunidades. Quiero debutar en algún nuevo grupo lo más pronto posible, para traer conmigo a mi adorado YoonGi. Tengo mucho miedo de que él sufra aquí por la actitud de las personas, pero sé que juntos lograremos vencer todos los prejuicios.

         

         

                              🌻



Me levanté a las 8:00 am, como siempre. Debía cumplir con la rutina de ejercicios que la agencia a la que postulo me daba. Aún no tenía una posición asegurada pero sé que pronto podré ingresar, o al menos eso espero.

Con mucha flojera me dirigí hacia la cocina para prepararme un café, una vez que ya tenía mi bebida en mis manos, fui a revisar la correspondencia. Era lo mismo que siempre, el periódico, una que otra deuda o recordatorio de pago y por último un sobre que llamó mi atención. En él se veía la estampa de Daegu, es decir, que provenía de allí. Con algo de duda lo abrí y leí todo lo que decía.

Me quedé estático unos minutos, mi YoonGi la estaba pasando mal allí, debía hacer algo para ayudarlo. Sé que muchas veces él intenta ocultar sus problemas y emociones pero vamos, el conocerlo desde que eramos unos niños me ayudó a poder comprender su tan misteriosa personalidad, cosa que no muchos han logrado.

Aunque no todo eran malas noticias, seguía preocupado por él. Mandar una carta demoraría mucho en llegar, así que decidí llamar al negocio de su familia, esperando que él estuviera allí.

Con algo de temor marqué el número que traía anotado en mi agenda de contactos y esperé. Después de que timbrara unas cuantas veces, una mujer me contestó.

-Buenas tardes, ¿con quién hablo? - Ese tono de voz me fue imposible no reconocerlo, por lo que solté una pequeña risa.

-Vaya Eunha, veo que tu voz no cambió absolutamente nada desde que me fui.- Escuché un par de gritos de emoción por parte de la otra línea, lo que me hizo sonreír, hace mucho no hablaba con ella.

-Oh Jiminie, realmente me alegra escucharte. ¿Cómo estás? Hace mucho que no hablamos.- Su típico sollozo actuado me hizo rodar los ojos, ella definitivamente, seguía siendo la misma.

-Bien bien, estoy muy bien, pero eso no es lo importante, ¿Está YoonGi? Quisiera hablar con él- Le dí un sorbo a mi café y esperé su respuesta.

-Yo también te extrañe cuñado- Escuché su típica risita-Pero veo que al que buscas es a mi hermanito. Dame unos segundos, de seguro está durmiendo o editando, quién sabe-Solté una sonora carcajada y asentí, como si es que ella me pudiera ver. A lo lejos, pude escuchar la voz de YoonGi.

-Jiminie?-Escuché su voz quebrada, algo en mí se rompió.

-Hyung...-Las lágrimas no tardaron en caer en ambos, los sollozos se escuchaban por medio de la línea telefónica.

-Bebé, ¿Cómo estás?-Sonreí por su apodo, mi Hyung era muy dulce cuando se lo proponía.

-Bien, pero siento que lo necesito Hyung, ¿Usted cree que podría venir pronto?-Mordí mi labio inferior con algo de temor. No pude contenerme, la curiosidad de saber si mi Hyung vendría era muy grande.

-Estoy haciendo lo posible bebé. Pero las cosas no van como esperaba.- Suspiré. Sabía que debía hacer algo.

-YoonGi, sé que amas hacer tus cosas por tu propia cuenta pero por favor, recapacita. Déjame ayudarte, esta relación se irá a la mierda si seguimos así. ¿Cuánto más tengo que soportar? Te extraño demasiado, te necesito. Las cosas se vuelven cada vez más estresantes y...solo quiero sentir que estás a mi lado, no quiero escuchar solo tu voz por una jodida línea telefónica. Eres el amor de mi vida...o...al menos eso creo, así que deberías dejar que yo te ayude. Si estás de acuerdo, te mandaré un pasaje para que vengas a Seúl en un mes, ¿Te parece? - Cerré mis ojos con fuerza, esperando la respuesta de YoonGi. Lo amaba, pero no podía seguir así, me estaba lastimando.

-Bien. Mándame el dinero, iré hacia Seúl pronto a estar contigo.- Sonreí llevando mi mano libre a mi boca para tapar el grito de emoción que saldría en cualquier momento.

-Gracias Hyung, sabía que entendería. Me tengo que ir, pero ya pronto volveré a llamarlo. Te amo mucho Hyung- Mi Hyung me respondió con un "te amo" y corté la llamada.

Con mucha alegría corrí hacia mi habitación. Allí saqué todos los ahorros que tenía. Fui contando billete por billete. Bien, tenía 200$,lo necesario para un viaje de Daegu a Seúl. Muy pronto tendría a mi Hyung conmigo y todo volvería a la normalidad, o al menos eso espero.









~"A veces somos tan egoístas que olvidamos pensar en los sentimientos del contrario"~

°°My little baby°°Yoonmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora