La Adicción De Matar

MI PRIMER ASESINATO

Justo cuando iba a disparar recordé a la persona que corria hacia nosotros...

Se detuvo a unos pocos metros de donde estábamos y tenia puesto un pasamontañas, entonces pensé...

Si se detuvo es porque debe estar aliado con este tipo o algo por el estilo, significa que tengo a un rehén lo que es bueno ya que no hara nada si no quiere que algo le pase a su compañero... no se si me sirva pero no le puedo disparar no se si solo son ellos dos, si hay más personas con ellos escondidas y le disparo podrían matarme antes de que pueda huir, sin embargo....no, no hay nadie mas si hubiera mas personas ya me habrían matado aún así, en esta situación no puedo correr ningún riesgo !diablos¡ Eso quiere decir que tendré que negociar la vida de este sujeto.

Bien aqui voy.

—!Oye tú¡ ¿Quién eres? Muestrame tu rostro.

—Yo.... no te dire mi nombre, pero te mostraré mi rostro.

Su voz es de mujer, cuando se quito el pasamontañas pude comprobarlo era mujer y tenia una navaja en la mano derecha, probablemente para amenazarme pero no me afectaba porque no podía atacar a ésa distancia aunque podría lanzarmela.

—Tira la navaja o tu amigo irá directamente al infierno.

Arrojó la navaja hacia atrás y comenzó a caminar hacia mi muy lentamente.

—Recuerda que tengo a tu compañero, así que quedate quieta si sabes lo que le conviene.

Se detuvo a tres o cuatro metros de donde yo estaba.

—Entiendo.....matalo si quieres solo a sido un estorbo para mi, ya no lo necesito más.

Todavía tenía mí dedo en el gatillo lista para disparar, cuando el hombre grito con furia.

—!!Vete al infierno Naomi¡¡.

Bueno ya se cuál es su nombre.

—Descuida pasara algún día y cuando ese día llegué nos veremos en el infierno Tom.

Sonrió de lado se dio media vuelta y comenzó a caminar hacia donde estaba su navaja, cuando se agachó para recogerla no lo pensé dos veces apunte a su cabeza y dispare.

Cayó al suelo en el instante, como tres segundos después el tal Tom grito con todas sus fuerzas el nombre de Naomi, me miro con odio y me dijo.

—!Felicidades eres una asesina¡.

—Descuida puedo vivir con eso.

—!Maldita idiota¡ Te vas a arrepentir.

—Tal vez pero no hoy...y ya deja de lamentarte que te encontrarás con tu amiguita muy pronto.

—¿Qué?, vas a matarme.

—No te esfuerces en decir lo obvio.

En ese momento note que tenía una gran sonrisa en mi rostro la cual seguía ahí cuando le dispare en la cabeza.

La sangre me salpico la ropa y parte de mi cara. Cuando en ese momento recordé a mi padre la sonrisa desapareció de mi rostro porque no sabia si mi padre ya había llegado a casa, así que lo llame.

(En la llamada)

-¿Papá?-

-Hola hija ¿Qué pasa?-

-¿Llegarás a dormir está noche?-

-No hija lo siento pero tengo que arreglar algunas cosas del trabajo-

-Bueno entonces nos vemos mañana-

-Si hija hasta mañana-

(Al terminar la llamada)

Perfecto mi padre no estará en toda la noche tengo tiempo de sobra para limpiar este desastre.

—!Bien manos a la obra¡.

Primero miré hacia todos lados para ver si no había nadie cerca y al parecer no, no había nadie a...al menos diez metros, pero pude ver algo que parecía una mochila en el lugar donde Tom me acorralo, seguramente se le cayó al muy imbécil.

Me acerque con cuidado para revisarla y decía «PROPIEDAD DE TOMAS KLEIN»

—!Ja¡ Lo sabía.

Dentro de la mochila había otra pistola, un garrafón de gasolina, un celular y dos identificaciones, la de Naomi y la de Tom ¿Hermanos? Bueno no dudo que puedan ser falsas pero creo que si son reales...así que por eso me obedeció, bueno no me sorprende.

—Naomi y Tomás Klein— susurre

Llevé los cuerpos hasta un callejón, los cubri con algunas bolsas de basura.

Fui corriendo a una fabrica cercana donde vendían químicos, compré una botella de ácido y por suerte el chico que me lo vendió no preguntó por la sangre, tal vez porque le di algo de dinero extra.

Regresé corriendo al callejón donde estaban los cuerpos.

Cuando llegué fui con mucho cuidado de no pisar la sangre, quite las bolsas de basura, cuando le quite el pasamontañas a Naomi pude ver que era una mujer con el cabello café oscuro, cara algo pálida y pestañas largas con una que otra cicatriz en su rostro después de ver como era Naomi les quite toda la ropa a ambos cuerpos, ya que podría tener huellas dactilares, ADN o algo así y derrame ácido sobre el rostro y manos de ambos cuerpos.

Esperé un rato mientras veía como se desprendía la carne muerta de sus huesos y como se les deshacía el cabello, pedazos de carne cayendo al suelo.

De nuevo esa sonrisa en mi rostro casi involuntaria era una sensación muy agradable.

Pero aún no terminaba, dos o tres minutos después acomode las bolsas de basura sobre los cuerpos y derrame todo el garrafón de gasolina encima de ellos, después les prendí fuego con un fósforo que tenía.

Mientras observaba como los cuerpos ardían guarde las pistolas, la navaja de Naomi, la ropa, el ácido, las identificaciones, el celular y el garrafón vacío de gasolina.

—Guau esta mochila es muy grande.

No tenia tiempo de limpiar la sangre así que sólo revise si no habia pisado o tocado alguno de los charcos y por suerte no, la sangre estaba intacta y sin un rastro de mi .

Me hubiera gustado quedarme a ver como sus cuerpos ardían abrazados por las llamas, pero no podía sabia que era muy arriesgado así que me fui pero no sin antes recoger los cartuchos gastados de las balas y meterlos en la mochila de Tom.

No me preocupe por las balas incrustadas en los cuerpos de Tom y Naomi ya que me asegure de tirar suficiente ácido en donde las balas pegaron incluyendo el hombro de Tom asi no podrían identificar el calibre de la bala ni la marca de la pistola.

—Bueno veré lo que pasó mañana en las noticias estoy muy cansada.