Capitulo 15

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Amanecí un poco disgustada por lo que pasó ayer en la cena. Había algo de el... que no me gustaba nada.
Marqué el teléfono y llame a Moises.
Mmm ¿quien es? - Dijo con la voz ronca, parecia que lo habia despertado.-
Hola principito, buenos dias!
Carmen me has despertado- seguidamente bostezó.-
Le conté todo lo que paso ayer y la salida que tendria que hacer con jesus.
Noté que se levanto rapido de la cama y se puso serio.
Carmen, ¿Me estas diciendo que vas a quedar con el?- Notaba su enfado en la voz, era normal que se pusiese así, ¿pero que iba a hacer?.-
Moises yo te prometo que no va a pasar nada, solo voy a ir a dar una vuelta para que mi padre se quede contento y ya esta.
Escuchame una cosa, cualquier cosa me llamas. Que yo llego en dos segundos, ¿Vale? -Estaba preocupado, y no entiendo el porque, ese muchacho es del culto, malo no tiene que ser, ¿No?.-
Vale, luego hablamos.

Baje al comedor y empezamos todos a comer tranquilamente. Hasta que mi padre habló y la tension se volvió a notar en el salón, exactamente igual que ayer.
Carmen, le he dicho a Jesus que te pase a buscar a las 18:00, te parece bien?
Si, me parece perfecto- Lo dije con un tono irónico, claro esta.-
Carmen, no se porque te molesta tanto quedar con el muchacho, pasa algo? - Mi hermano me conocia mejor que nadie y sabia que yo algo escondia-
No pasa nada Ezequiel, solo que... No quiero que la gente hable sobre mi cosas que no son ciertas, porque yo a ese mozo no lo quiero de marido.
Carmen, aunque tu no lo quieras, puede ser tu amigo- Dijo mi madre, que no habia hablado hasta ahora-
Dejemos el tema, no quiero hablar mas.

Terminamos de comer y fregué los platos. Eran las 16:30 cuando fui al armario con pesadez a mirar que me ponía.
Me decidí por unos pantalones tejanos rotos un poco anchos, una camiseta blanca basica y aparte una chaqueta roja con unos tacones a juego.
—————-(tercera foto)——-
Mama!! Puedes venir un momento? -Le pregunté-
Dime Carmen
Me puedes hacer estas trenzas boxeadoras??- Le enseñe la foto de una chica que habia visto en una red social-
Claro hija, pero te voy a poner un hilo dorado para que destaque la trenza.
————-(cuarta foto)———
*DINGDONG*
Que puntual macho
Bajo las escaleras y me encuentro a mi padre hablando con Jesus de fútbol.
Bueno, nos vamos?
Em, claro. Adios Tio Antonio, nos vemos luego.
Adios, pasarlo bien.- Rodeé los ojos ante ese comentario, el sabia perfectamente que iba para que él quedase bien con la familia, no por gusto. Fuimos a su coche y me abrió la puerta, demasiado caballeroso.-
Gracias- Le dije con una sonrisa-
El me devolvió el gesto y estuvimos todo el viaje sin hablar.

Llegamos al centro comercial y fuimos a una cafeteria, yo me pedí un café y un cruasán de chocolate, y el se pidio un granizado. Estabamos en completo silencio, hasta que el de golpe y porrazo me dijo:
Carmen te quiero
Al escuchar esa ultima palabra me atragante con el café y tuve que darme golpecitos en el pecho para que me entrara el aire a los pulmones.
Perdona, que?
Que te quiero, que estoy enamorado.- En sus ojos no veía el brillo que tenia Moises, era distinto, yo era un capricho para el.-
Mira Jesus, no es por decepcionarte. Pero no me gustas, no quiero conocer a nadie. Lo siento- Al escuchar esas palabras se le transformó la cara, notaba la ira en sus ojos. Nunca habia visto a alguien que transmitiera tan mala energía.-
Vas a ser mia quieras o no quieras.
Jesus llevame a mi casa pero YA!- Ese tio me estaba dando miedo, no lo decía con chuleria. Parecia que lo decia enserio, ESTABA LOCO.

Cogimos el coche y el apretaba los nudillos en el volante de la rabia, de tal manera que se le estaban quedando las manos blancas.
Llegamos a la puerta de mi casa.
Bajate del coche- Dijo el secamente, y con odio en la voz.-
Ey! Ami no me hables asi, tenme un respeto como mujer que soy. Te empeñaste en llevarme al centro comercial sin preguntarme si yo queria o no. ¿Que querias que hiciera? ¿Seguirte la corriente? Lo llevas claro majo. - Abri la puerta del coche y sali pegandole un portazo.- Llegue a mi casa y no habia nadie, y por un momento lo agradecí.
Me quité los tacones que llevaba rabiando las dos horas que habia estado con el, y me puse el pijama.

Llame a mi prima y le conté todo lo que había pasado:
¿Que dices loca? ¿Como ha podido hacer tu padre eso?
No lo entiendo ni yo Koral, es algo súper extraño. .....

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