MI PRIMER AMOR

CAPITULO 8

Han pasado 2 días y no puedo ir al instituto ya que mi pierna fue la más afectada y mi mano solo un poco, pero hoy es diferente, ya que ocurrió algo extraño, hace unas horas vino Dylan a visitarme a ver cómo me encontraba, estábamos en mi habitación, con mi hermano en la puerta por supuesto, es extremadamente celoso conmigo y para mí es muy tierno, la cosa es que conversando con Dylan vino Ismael y no me di cuenta, por primera vez, no le di toda mi atención, él se amargo un poco que no lo podía atender ya que tenía invitado.

-Desde que ese niñato apareció ya cambiaste- eso es lo que dijo cuando Dylan se fue de mi casa.

- QUEE??!! ¡¿Discúlpame?! ¡Perdón por tener "¡Amigos" hombres, ustedes no son todo mi eje! - le dije un poco molesta ya que no me gusta que me hablen así.

- no que va! ¡La niña ya quiere crecer! ¡Pero sigues siendo una ilusa niña! –Dijo ya gritándome y haciéndome sentir mal.

- QUE DIABLOS TE PASAA!! ¡NO ES MI CULPA QUE HAYAS DISCUTIDO CON TU NOVIA! – le dije ahora si gritando y muy cabreada aunque también aparecieron las ganas de llorar

- NO NOMBRES A MI ENAMORADA EN ESTO! ¡ES QUE ACASO CREES QUE NUNCA ME IBA ADAR CUENTA! –me dijo histérico casi irreconocible, y me asuste mucho y rogaba que no digiera lo que creo que diría.

- DE QUE DIABLOS HABLAS AHORA! –dije con el mismo tono la voz.

-POR FAVOR NO TE HAGAS LA LOCA! ¡SE MUY BIEN DE TUS SENTIMIENTOS HACIA MI! ¡Y ADIVINA QUE! NO LOS CORRESPONDERIA!

Me quede simplemente quieta en mi lugar escuchando como poco mi corazón se rompía, y no sé qué mirada abre tenido que el cambio a una sorprendido y nerviosa.

-Katy..

-LARGO! - Grite sin esconder las lagrimas

- escúchame...

-LARGATE DE MI HABITACION! ¡NO QUIERO SABER MAS DE TI! - Dije llorando y empujándolo fuera de mi habitación sin importarme mi pie lastimado

-Katy, escúchame por favor....Fue una casualidad cuando lo escuche hace unos meses atrás- mi corazón dolía mas

-solo lárgate por favor no quiero escucharte no ahora, vete- le di un empujón y lo saque de mi habitación, caminar hasta mi cama y llorar hasta quedarme dormida.