Capítulo 2

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Hyunjin estaba aburrido, muy aburrido. Su madre ya se estaba cansando de ver a su hijo pasearse por la casa.

- ¿Por qué no llamas a Seungmin y salen a pasar el rato?- Le pregunta la mujer a su hijo.

- Le mandé un mensaje pero me dijo que su hermanita tiene una obra de teatro a la que deben asistir- Le contestó el niño.

- ¿Y tus otros amigos?- Le pregunta su madre curiosa.

- No hay, no existen- Contesta desinteresado.

- ¿Y si sales de la casa y ya?- Dice su madre.

- ¿Tantas ganas de deshacerte de mí tienes?- Pregunta con un gesto dolido- Cuando cumpla la mayoría de edad me vas a extrañar mujer - Dice con un deje de exageración.

- No es eso, pero simplemente quiero limpiar pero no puedo si te paras en todos los lugares donde acabo de pasar.- Contesta cansada su madre.

- Esta bien, me voy- Contesta resignado el hombrecito- Pero dame dinero, por favor.

- ¿Cuánto necesitás?- Le pregunta la mujer.

- Lo suficiente para que pueda salir de tu vida- Contesta dramático.

- Con esto te alcanza un helado- Le entrega el dinero al niño ignorando su comentario anterior- Ahora, salí de la casa.

- Está bien, está bien- Le da un beso en la mejilla a su madre- Nos vemos más rato.

Hyunjin salió de su hogar para dirigirse a la heladería, no quedaba muy cerca, pero tranquilamente podría hacer el recorrido caminando.

En en transcurso de su caminata el niño se preguntaba cómo era que su madre y su padre llevarán juntos desde hace más de dos décadas.
Aún recuerda la historia de su encuentro, sus padres se conocieron en un museo de arte. A su madre le facina las pinturas desde pequeña y su padre, simplemente había ido para conquistar a otra chica.

A Hyunjin siempre se le hacía divertido como su padre cambió de objetivo cuando conoció a su madre, el hombre era el típico don Juan de su universidad. Y, cual típica historia de amor, cayó rendido ante los pies de la inteligente de la escuela.

El menor esperaba que algún día cupido le dispare esa flecha y así encontrar el amor verdadero. Pero de ambos lados, no quería tener otro amor unilateral.

Hyunjin estaba tan inmerso en sus pensamientos que no se dió cuenta que había chocado con alguien hasta que está persona habló.

- ¡Hey! Deberías tener más cuidado- Le recriminó la persona.

- Disculpa, realmente no te ví- Se disculpó el menor.

- Que tu seas un poste de luz no nos hace a todos unas hormigas.- Contestó el contrario.

Hyunjin quería reír pero al ver la expresión del muchacho, prefirió callar.

- No es por eso, no estaba prestando atención- Se excusó.

- Ajá, si claro. Deberías prestar más atención por donde caminas.- Le dijo el otro.

- Realmente lo sien- Hyunjin no pudo terminar su frase porque el más petizo lo interrumpió.

- ¿Sabes? Ya que estas aquí ten- Le entregó un folleto.- no es muy caro y realmente sirve, creo que necesitas de mi ayuda. Esperaré tu llamado.- Y así el chico se fue.

Hyunjin estuvo un poco confundido, pero siguió su camino guardando el papel en uno de sus bolsillos.

Al cabo de un rato llegó a su destino, ordenó lo que deseaba comer y se sentó en una mesa del lugar.

Una vez de terminar de avisarle a su madre de su paradero, se dispuso a comer el helado. Aprovechó a ver el folleto que aquel chico le había entregado.

"El verdadero amor es desinteresado e incondicional, no conoce fronteras y no es crítico.

Si deseas encontrarlo, el hilo rojo debes buscar.
Y Seo Changbin es capaz de ayudarte"

Mentiría si dijera que eso no lo sorprendió. Hyunjin pensó lo increíble que era el destino para entregarle un folleto de un tema que el necesitaba. O, mejor dicho, que increíble era Seo Changbin.

¿Puedo ayudarte?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora