Lee JiHoon

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"Pequeño diablo" es como algunos suelen llamarlo. Sus profesores lo conocen como "El chico que siempre esta en el aula de castigos", pues desde pequeño JiHoon no es muy fanático de las normas así que se lo veía muy seguido en ese lugar, ya sea por golpear a alguien, sacar de quicio a los profesores o hasta bañar de pintura verde a las porristas, tontas porristas.

En preescolar, el pequeño JiHoon no se sentía a gusto con sus compañeros. Los niños eran todos unos tontos y las niñas todas unas creídas.
En su último año de secundaria ese pensamiento no ha cambiado para nada.

¿En el amor? Pues a JiHoon no le importa eso. Él realmente cree que nadie podrá despertar ese sentimiento en él. Aunque anteriormente ha salido con chicas y chicos, más chicos que nada. Pero duraba muy poco y nunca se ha enamorado realmente, tampoco le importa enamorarse. Muchas personas en el instituto han puesto y ponen sus ojos en él pero solo eso, pues JiHoon es "inalcanzable" para sus compañeros/as. Su vida de soltero esta bien como esta.

JiHoon ahora mismo estaba despertando de mal humor por la estúpida alarma de su celular. Cuando finalmente decidió quitar las mantas se cegó un poco por los fastidiosos rayos de sol que entraban por su ventana, tapó sus ojos con una mano y bufó con muy pocas ganas de levantarse de su cómoda cama, pero debía hacerlo.
Luego de quedarse sentado en su cama mirando media hora una de sus zapatillas en el suelo, finalmente se dispuso a salir de su cuarto con dirección al baño.

— ¡Buenos días, Enano gruñón! —Gritó su hermano menor mientras pasaba corriendo por su lado con la misma dirección que JiHoon.

Lee Chan es dos años menor que JiHoon. Ambos siempre están discutiendo por una cosa o por otra, JiHoon a veces duda de que sea su hermano. Seguro es un niño que sus padres encontraron en el basurero.

— ¡No Chan, ni se te ocurra! —Exclamó apurando el paso para llegar primero al baño.

Al final ambos quedaron frente a la puerta empujandose el uno al otro.
Era una de las discusiones de hermanos que tenían todas las mañanas.

— ¡Yo llegué primero! —Gritó el menor seguido de un empujón hacia JiHoon.

— ¡Yo nací primero! —Contra atacó el mayor.

— ¡¿Y eso qué?!

— ¡Tengo más beneficios!

— Ah sí, claro. El hermano mayor que necesita ayuda con los estantes más altos. —Dijo Chan burlándose de la estatura de su hermano mayor.

— Te haz pasado. Al menos yo tengo edad para comprar bebidas alcohólicas y descargar todo el porno que yo quiera.

— Pues recuerdale a tu altura que ya eres mayor porque creo que aún no lo sabe.

JiHoon lo miró con enojo y quería mandar a volar a su hermanito pero no lo hizo porque sus ganas de orinar eran más fuertes que cualquier cosa. Así que en vez de discutir ideó otro plan.

— Oye Chan, ¿eso que esta en el suelo no es tu CD favorito de Michael Jackson?

— ¡¿Qué?! ¡¿Donde?! —El menor volteo con sorpresa como si su vida dependiera de ese CD mientras olvidaba por completo la pelea.

JiHoon aprovechó eso y entró al baño colocando la traba por dentro.
Chan cuando notó que fue engañado se puso a lloriquear en la puerta.

— JiHoon, por favor. Tengo que orinar. Siempre ganas tú.

— Pues aguanta o puedes regarle las flores a la vecina Hwang. No es mi problema. —Sonrió con malicia y luego se dispuso a vaciar su pobre vejiga.

Love Problems | Seventeen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora