3. Final

144 10 1
                                    

Estábamos en el cuarto de Harry, él veía televisión mientras yo solo lo acompañaba.

-Harry cariño, necesito que vayas por unas cosas al mercado –gritaba desde la cocina la mama de Harry.

-Ya voy mama, ven dex, vámonos- ya se había curado mi pata, parecía como si no le hubiera pasado nada. Dejamos de ir al parque, a la mama de Harry ya no le parecía correcto después de lo que ocurrió además de que ya no estaba en vacaciones y tenía que ir al colegio.

Harry y yo salimos al mercado que estaba a unas 5 cuadras, mi amo iba tranquilo y yo solo lo iba siguiendo, llegamos al mercado y el fue a comprar mientras yo lo esperaba afuera, en lo que pasaba el tiempo, veía a un señor, viejo, pero no muy cuerdo, decir cosas sin sentido como ‘’LOS EXTRATERRESTE VENDRAN Y CHUPARAN NUESTROS CEREBROS’’ y cosas así, solo traía un pantalón roto, la gente lo observaba y miraba el espectáculo que el señor daba. Cuando salió mi amo, de inmediato vio al señor como todos los demás que estaban cerca, pero antes de que pudiéramos irnos el señor le grito a Harry y el volteo.

-Jovencito, no tiene comida para mí, los aliens de Egipto comen mucho, y no quiero que me coman el cerebro- decía el señor, algo preocupado, pero a la vez muy feliz.

-No, lo lamento- respondió mi amo muy confundido, el señor insistía en que le diera comida, y mi amo le negaba, hubo un punto donde el señor empujo a Harry hacia la carretera pero no cayo siguió parado, corrí hacia él y lo trate de empujarlo, después sentí el impacto, carro que iba hacia él.

No miraba nada, solo unas pequeñas siluetas borrosas, alguien sostenía mi cabeza, era Harry, lo sabia, lloraba desesperado pero no sabía porque, quería levantarme pero no podía, me dolía demasiado mi cuerpo, sentía como si todo mi cuerpo estuviera quemado, después mi vista se aclaró, Harry me abrazaba y lloraba, muchas personas lo veían y había un carro negro que estaba muuuy cerca de nosotros, trate de pararme pero Harry me cargo, hablo con un señor y nos metimos al carro negro. Tiempo después llegamos con el veterinario, nunca había visto llorar tanto a Harry, la doctora me tomo y me recostó en una mesa, me dolia mucho, sentía como me iba durmiendo.

Cuando desperté me sentía peor, me dolía todo, sentía mis patas adoloridas, mi cabeza pulsaba, mi pecho me ardía cada que respiraba, no lo podía soportar, vi a mi amo entrar y abrazarme con mucho cuidado.

-Dexter, perdóname por favor, yo no quería que te pasara esto, lo siento tanto, soy la peor persona del mundo, como pude ser tan tonto, por favor no me dejes, quiero que estés siempre conmigo, no sé qué haría sin ti, Dex amigo- Harry lloraba y yo solo le lambia la cara,  no sabía porque estaba tan triste, pero odiaba verlo triste- Si no hubiera hablado con ese loco, nada de esto hubiera pasado- lo miraba, enserio parecía arrepentido, me dolía verlo así, me dolía más que el dolor que sentía en mi cuerpo, este dolor era diferente, venía desde mi corazón y era insoportable- Amigo, tienes…tienes muchos huesos rotos y… y, tus costillas perforaran tus pulmones en cualquier momento, tu cadera se dañó y ya no tienes sensibilidad acá atrás- miraba que tocaba mis patas traseras, pero no las sentía, ¿porque no las sentía? Con cada palabra Harry lloraba cada vez más, no me importaba porque no sentía mis patas, no me importaba lo que sentía, no me importaba nada, solo me importaba el, quería que dejara de llorar- ya no volverás a caminar, ya no podrás respirar bien, y han decidió que lo mejor será sacrificarte- Harry lloraba, lloraba tanto y tan fuerte que me recordó al pequeño que me recogió de la calle, que cuando se caía lloraba y solo lo consolaba el cariño de su mama y que con unas lambidas mías en la hería lo podía calmar, pero esta vez era diferente, había crecido, ya no era un niño y no había heridas que sanar, y por más que tratara de animarlo no podría hacerlo sonreír- No sé qué… qué hare después de que te vayas, eres mi mejor amigo, mi compañero de vida, mi hermano, mi colega –suspiro e intento hacer una pequeña sonrisa- aún recuerdo el día que te encontré, estabas todo sucio y apestabas, eras un perro feo –rio un poco, eso me hizo sentir un poco mejor- pero ese día nos habían contado la historia de un patito feo de buen corazón, al que nadie quería pero al final se vuelve un bonito cisne; me recordaste a ese patito, nadie te quería, pero yo sabía que si te cuidaban y te atendían, podrías llegar a hacer el gran y maravilloso cisne que ahora eres –Volvió a sollozar- ¿sabes? toda mi vida eh hablado contigo, no sé si me entendías algo de lo que digo, pero no me importa, me gusta hablar contigo, porque sé que me escuchas, siempre estas cuando te necesito, nunca me abandonarías, aunque no tenga a nadie en el mundo, te tendrá a ti, mi mejor amigo –Miro hacia mi collar y tomo el dije de ala que me había obsequiado - ‘’Un perro es lo único que te amara más de lo que se amaría a si mismo’’ me salvaste la vida Dexter, me protegiste en todo momento, me diste todo el amor que un perro puede dar a su dueño, me diste felicidad, alegría, graciosos momentos, tu amor, ¡diste tu vida por mí! me diste todo lo que un chico puede pedir de su mascota, doy gracias a dios por ponerte en mi camino, gracias al maravilloso ángel que me mando, por ponerte en mi vida, gracias al patito que me envió para convertirlo en cisne –Harry no paraba de llorar, si el supiera que en realidad el agradecido soy yo, porque sin él, hubiera seguido siendo el perro callejero que nadie quiere, el perro sucio de la calle, el perro que todos maltrataban, por un simple gesto de un pequeño niño, yo le agradecí todo mi vida, y le di mi vida , me sacrifique por él, por todos los momentos que pasamos juntos, por todo lo que él hacía por mí, por el pequeño niño que me dio su torta aquel día en la calle, por aquel niño se esforzó por cuidarme, por aquel niño que me amo a pesar de saber de dónde venía- vales 1,000 veces más que todos los perros de la más fina raza juntos, vales 1,000 veces más que todo el oro del mundo, vales 1,000 veces más yo Dexter, nunca olvidare lo que hiciste por mí, siempre vivirás en mi corazón, desde hoy serás y para siempre mi mejor amigo- no soportaba el dolor que sentía, pero cuando Harry me abraza no era tan malo, me abrazaba demasiado fuerte, me abrazaba con todo el amor que alguien pudiera recibir, una doctora entra a la sala y miro a Harry con nostalgia.

-Las despedidas más largas, son las más dolorosas  - Harry se separó de mí y solo le asintió, dejo que me inyectaran un líquido en mi pata trasera.

-Dexter amigo, gracias por amarme incondicionalmente, gracias por ser el mejor perro del mundo, espero y yo haber sido un buen amo para ti amigo, tu merecías algo más que yo, si pudiera, te daría mi vida amigo- Iba perdiendo la consciencia, pero nunca deje de escuchar a Harry- Te amo con todo mi corazón, eres el mejor amigo que alguien pudiera tener, gracias por todo campeón- Nunca dejo de llorar, siempre me miraba a los ojos, mientras me acariciaba una y otra vez mi cabeza- quiero que recuerdes, que… que sin importa que, yo.. yo siempre te amare incondicionalmente.

Ya no podía mantener los ojos abiertos, poco a poco los iba cerrando hasta que quedaron completamente sellados, para siempre. Por primera vez no me duele nada, me siento relajado, sé que nunca más volveré a sentir dolor, ahora estoy en un lugar mejor, y agradezco a Harry, el pequeño niño que me adopto y me cuido prácticamente toda mi vida, porque comencé a vivir, cuando ese pequeño llego a mí, gracias Harry, por quererme como soy, por amarme incondicionalmente, fuiste el mejor amo que un perro pudiera tener, eras mi vida entera, solo me importaba verte feliz, porque el verte feliz, me hacía mucho más feliz a mí, es muy triste que este sea nuestro adiós, pero siempre serás gran parte de mí, adiós mejor amigo y gracias por todo, siempre de amare incondicionalmente.

Te amare incondicionalmente | H. SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora