Nuestra pequeña gran bendición

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07:08;16

Narra Darién

Ruidos y música en la cocina me obligaron a levantarme de la comodidad de mi cama, al mirar la hora en mi celular me doy cuenta de que son ya las 11:34 am, salgo lentamente de mi habitación y voy hacia la cocina, en la cual se encuentra Emma, recargado en el marco de la puerta la observo como mueve sensualmente sus caderas al ritmo de la música, lo cual provoca que mi erección matutina se hiciera mucho más grande y dura a tal punto que dolía.

Silenciosamente me acerco hacia a ella tomándola de la mano la giró hacia mí, provocando que diera un leve brinco del susto.

-Dios Darien que susto me has dado- me dice con una mano en su pecho

Sin hacer caso a sus palabras mientras ella me observaba acerque mis labios a los suyos dejándolos a 1 cm de distancia, poniendo mis manos en su cintura y ella poniendo los suyos en mi cuello me atrajo lentamente juntando mis labios a los suyos los cuales mordí levemente. Su lengua invita a la mía a un recorrido por toda su boca. Deslicé mis manos por sobre su camisón de dormir, recorriendo de su cintura a sus senos los cuales apreté suavemente, mientras la acorralaba contra la encimera.

Con delicadeza fui subiendo su camisón, sintiendo la suave piel de sus muslos contra mis dedos. Perdí todo razonamiento lógico, en un abrir y cerrar de ojos quité mi camisa y desatando el nudo de mi pijama, Emma lo bajo junto a mi ropa interior deteniéndose por un momento, en cual pensé que se arrepentiría de todo esto...pero no.

Ella tomó mi miembro con sus manos y comenzó a acariciarlo. Yo le baje la parte de arriba de su pijama, descubriendo sus senos los cuales acaricie con la yema de mis dedos sacándole un leve gemido cerca de mi oído, rápidamente la desnude y sentándola en la encimera separe sus piernas dirigiendo mi miembro a su entrada, deteniéndome unos momentos la mire a los ojos.

- ¿estas seguras de que quieres continuar? – le pregunté acariciando su mejilla

- Si yo fuera tu no me detendría a hacer preguntas, ya que esta puede ser la primera y última vez que pase algo entre nosotros.

Me dice atrayéndome hacia ella para besarme, entró lentamente en ella sacándonos gemidos a ambos, ella aferrándose a mi espalda y yo a su cintura sin dejar de besarnos.

Digan que soy cursi un marica o lo que sea me da igual, pero cuando entraba en su interior era algo mágico, ver mi reflejo en sus pupilas era excitante, sentir su piel contra la mía me hacía desearla y quererla aún más de lo que lo hacía, a cada segundo el placer y gemidos iban aumentando, el clímax estaba por llegar, solo un poco más y ambos estallaríamos, cuando de pronto el fuerte llanto de Mason me obliga a abrir los ojos...llevándome la decepción una vez más de encontrarme solo entre las sábanas de mi cama con una erección y una corrida enorme

Sin ánimos me dirijo al baño para ducharme, casi dos meses sin sexo ya me estan pasando la cuenta, hace tres dias que sueño con Emma de esa manera, y la verdad es demasiado frustrante no poder saciar mis ganas de hacerla mía

-Buenos días- dije entrando a la cocina

-¿ Dormiste bien?, no tienes muy buena cara- dice Emma dándome mi desayuno

-Si tranquila, es por los exámenes de la universidad- le doy una sonrisa

-Oye hablando de exámenes ¿ a que hora tienes clases hoy?

- Desde las 9 am hasta las 2 pm ¿porque?

-Necesito que cuides a Mason a las 11 am, e hablado con el director sobre las clases online y me haran un examen para ver si puedo o no ya que igual he faltado 2 meses- dice Emma