Desde mi cielo

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Seung...

Sin duda alguna eres el amor de mi vida, eres el toque de seriedad y fortaleza que me faltaba.

Tan reacio a decirme que me amabas hasta que te amenace con irme de fiesta con Chris, que en ese momento gustaba de mí.

-¡No te vayas con él, Phichit! ¡Porque yo te amo!-

Oh diablos, cuando te escuche gritarme aquello, mi corazón me dicto que cerrará la puerta para correr a tus brazos, colgarme de tu cuello y besarte.

-Yo también te amo, Seung-

Y desde ese día, comenzaste a sonreír más, amor.

A besarme y decirme que me amabas con locura.

A llevarme al cielo y dejarme caer en las llamas del infierno al hacerme llegar al mejor de los placeres cuando haciamos el amor.

Te volviste mi todo y nada a la vez, mí mejor remedio para los agotadores días de trabajo como director publicitario, mi pañuelo de lágrimas al ver morir a nuestros "hijitos hámsters".

Mi mejor placer y recibidor de amor.

Por eso mismo, quiero que continues tu vida, cariño.
Que vuelvas a enamorarte y estar junto a alguien que te ame tanto cómo yo lo he hecho y continuaré haciéndolo desde dónde yo esté.

Te dejó libre para que beses y sonrias de nuevo con alguien más, mereces amar y ser amado. No atarte a mí, Seungi.

¿Recuerdas que la primera vez te dije así, sólo frunciste el ceño para irte a la habitación y no hablarme por 2 horas?

Fue divertido y lindo el verte salir del cuarto por el aroma del Kimchi de res que sé y te encanta. Con tu aún ceño fruncido, te sentaste en la mesa y agradeciendo por la comida, comenzaste a comer.

-Esta bueno...-

Respondiste para yo besar tu mejilla y abrazarte por el cuello con cariño.

-Me alegra que te guste, amor-

Tan bellos y graciosos momentos viví a tu lado.

Después de todo 4 años de relación, entre ellas 2 de casados, no se dicen fácil. Pasamos por momentos de mucha tencion y celos por diversos motivos o compañeros de trabajo.

Pero nada que no supimos afrontar y continuar adelante, porque nuestro orgullo se doblegaba al ver que las lágrimas ya estaban en los ojos del otro. Esa era nuestra señal para detenernos y envolvernos en un enorme abrazo, besarnos, acariciarnos con ternura mientras dejábamos libres las lágrimas por herirnos así.

"Siempre serás mi presente, mí futuro y mí perdición"

En una ocasión te dije eso, sólo me abrazaste, besaste e hiciste el amor, no como siempre...esta vez fue derrochando más amor a mi, me trataste con tanta ternura y delicadeza que me sentía cómo una de tus esculturas o pinturas.

Al llegar casi al éxtasis, me miraste con sumo amor para sonreírme.

"Y tú eres mi musa, mi fuente de inspiración y el amor de mi vida. Mi destino y abismo"

Esa noche nos amamos cómo nunca, fue en el primer aniversario de nuestro matrimonio y sin duda fue inolvidable...

Limpie las lágrimas que recorrían mis mejillas, Yuuri junto a Viktor me observaban en el sillón de enfrente, brindandome con la mirada su apoyo.

Y continúe.

Por ello se feliz, sal al mundo y conoce a más personas, te amó tanto que no me gustaría verte encerrado en nuestra habitación.

En donde los recuerdos de tantas noches, días y tardes de nuestro amor se presentaron en cualquier estación del año.

Y me parte el corazón herirte así pero no podemos evitar al destino, que nos hizo felices por muchos años pero llego el momento de decir adiós. De dejarte libre.

Te amo Seung, siempre me sentí el ser más afortunado del mundo cuando dije "si, acepto" frente a tus ojos y la presencia de nuestros amigos más íntimos el día de nuestra boda

Amé, amó y amaré siempre el haber sido Phichit Chulanont Lee, con toda mi alma.

Sonríe.

Ama.

Vive.

Grita.

Forma una familia por mi, cariño.

Por siempre tuyo, en esta y todas las vidas que existan.

Phichit...

Caí de rodillas al suelo con la carta entre mis manos, las lágrimas jamás se detuvieron y brotaban más amargas que antes.

-Seung...tranquilo, por favor...- Yuuri intentaba levantarme del suelo con ayuda de Viktor.

Nos sentamos nuevamente en el sillón para ser apresado entre los brazos del mejor amigo de mi esposo.

"Cuando te sientas triste, deja que Yuuri te abrace...tiene un algo que te reconforta mucho, créeme"

Y era cierto, poco a poco calme mis nervios pero las lágrimas no paraban.

-Estamos aquí para ti, Seung. Sea lo que sea y necesites, cuenta con nosotros- Viktor también lloraba porque su esposo igual lo hacia.

Después de todo, no era fácil el perder a tu mejor amigo por una enfermedad terminal.

Y mucho menos para mí, su compañero de vida y quién le amó con terrible locura. Quién le regalo y recibio tantos momentos hermosos de ese precioso moreno de oscuros ojos y sonrisa resplandeciente.

Sonrisa que ya no veré, más que sólo en sueños.

-Phichit me entregó la carta cuando fui a visitarlo, dijo que si algo le...le pasaba...te la diera, así como el que supieras te amaba muchísimo...- las lágrimas bajaron por las mejillas de Yuuri y fue abrazado de los hombros por el platinado.

-Gracias Yuuri...de verdad a ambos por estar aquí...gracias- intente sonreír pero no podía.

Mi motivo para sonreír se había ido con mi corazón y todo lo que me formaba.

-Te dejaremos solo, Seung...lo que necesites, llamanos- Viktor se despidió igual que Yuuri para ambos salir por la puerta.

Caminé a la habitación y me tiré sobre la cama, abracé su almohada que aún conservaba su dulce aroma; canela y manzana.

Besé mi anillo plateado, que simbolizaba mi union con él, aunque ya no estuviera aquí...mi corazón no podría pertenecerle a nadie más que a Phichit.

Lloré un poco más, sacando aunque sea una milesima parte del dolor provocado al perder el amor de mi vida, mi destino y final.

-Gracias por hacerme tan feliz amor, por ser mi todo y nada...por amarme tanto como pudiste, por ser mío...-

Y Seung, sonrió al recordar la bella sonrisa de su precioso moreno entre sueños...

~Lyrics~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora