Natalie tomó sus cosas y salió de su casa, justo después de ver el mensaje de la madre de Joseph.
Tomó un taxi y el camino se le hizo eterno.
Al llegar estaba Sophia en la sala de espera, al verla la abrazó. Acto que le pareció muy extraño a Natalie, sin embargo le correspondió.—Tienes que ayudarlo, por favor — Dijo Sophia entre llanto — no sé qué pasó entre ustedes dos, pero por favor. Ayudalo.
Las chicas se separaron y Natalie trato de calmarla para que le dijera que sucedía y porqué le habían dicho que fuera al hospital.
Antes de que Sophia pudiera responder, a Natalie la cargan en un hombro. No sabe quién es, es demasiado alto y fuerte para que sea Charles o Chad, pero sabe que es un hombre.—¿Quién eres y que rayos haces? — Preguntó Natalie pataleando.
—Todo esto es tu culpa, Natalie — Esa voz Natalie la reconocería donde fuere.
—Blake—Dijo en un susurro y recuerdos vienen a su mente de nuevo.
"cerda, cerda, ¿Por qué no dejas de comer?"
"mira, la gorda va a llorar"
"cuidado, nos puede aplastar"
"Gorda, Gorda, nadie te quiere ni te querrá"
Sin que Natalie se diera cuenta, sus ojos estaban cristalizados con las lágrimas a punto salir.
Entraron a una habitación y él la dejó en el suelo, ella no fue capaz de verlo, ni de hablar. Sólo se dio la vuelta y sus ojos se sorprendieron al ver a Joey en una camilla con muchos tubos por todo su cuerpo.
—Natalie, si viniste— Su voz era débil, sus labios estaban resecos y su madre estaba a su lado. en cuanto dijo eso, la madre se volteó.
—Gracias por venir —Dijo la madre tratando de parecer fuerte.
—¿Nos podrían dejar solos? Ya pueden ir a casa — Dijo Joey. Los acompañantes obedecieron y se fueron. — No pensé que vendrías — dijo con los ojos cristalizados.
—¿Qué.. Qué te pasó? — Su voz estaba entre cortada. Temía a la respuesta de Joey.
—¿No es obvio? — Una risa amarga se hizo presente. — No quiero vivir, ya no quiero vivir si no es contigo. —tomó la mano de la chica, sus manos estaban frías.
—Sabes que te detesto y todo lo que te hice... Deberías odiarme también.
—No te odio, no te odié y no te odiarte jamás.
—Me hiciste la vida imposible durante mucho tiempo y creí que ya habías aprendido. Te detesto, pero no quiero que mueras. — Se sentó en la silla del lado y Joey comenzó a acariciar el rostro y cabello de la chica.
—Te molestaba porque me gustabas, te quería, te amo — Soltó de repente.
—No mientas, eres un maldito idiota, tu no me querías. Cuando se quiere a alguien, nunca se le hace lo que tu me hiciste.
—Lo hacía para llamar tu atención, siempre te la pasabas con ese chico.... James... — Ella dio una risa amarga.
—Carson, ese chico es Carson. En ese entonces aún le decían James. Y no quiero que mientas más, mi venganza ya esta hecha, solo vuelve a tu vida normal y dejame en paz. Consíguete una novia que si te quiera, yo soy feliz.
—Mientes — intentó sentarse — mientes. Tu me quieres, lo sé, se nota en tu mirada y en como tú cuerpo se tensa al sentirme cerca. Ese beso, en ese primer beso sentí... Sentí que era amor verdadero, tu me quieres solo tienes que convencerte a ti misma.
—Yo no te quiero. Te detesto, te detesto — Las lágrimas corrían por sus mejillas.
—Está bien, te creo. — dio un suspiro — Solo acércate y después de esto, te juro que seguiré con mi vida y haré como si nunca te hubiese conocido. Si eso es lo que quieres.
Ella con cierta desconfianza se acerco a él y miro sus ojos, en ese momento estaban verdes.
Lo que más le gustaba a Natalie de Joey era como sus ojos cambiaban de color al sentir emociones o al mirar algo que en verdad le gustaba.
Se sentó en la cama enfrente de él, él ya estaba sentado.
La miro de los ojos a los labios y sin previo aviso, la besó .
La besó como si su vida dependiera de ello, no quería soltarla, porque sabía que ese sería su último beso y probablemente la última vez que la vería en persona.
Natalie se dejó llevar por el beso y lo disfrutó, lo disfrutaba como la primera, porque, aunque no quería aceptarlo, él seguía gustandole, lo quería, solo que el rencor la tenía ciega.—No puedo creer que me hagas esto— Para sorpresa de ambos, Jacob apareció en la habitación.
Ellos se separaron y lo vieron, sus ojos estaban cristalizados, pero aún así presentaban furia.
—¿Por qué mierda haces esto? ¿Desde cuando? Me decías que lo odiabas, eres una maldita mentirosa.
—Jacob, dejame esplicarte... — Intentaba decir Natalie, pero Jacob la tomó del brazo.
La acerco a sí mismo y la miró a los ojos, ella se sentía vulnerable.
Sin aviso alguno, la besó, la besó apasionadamente. La alzó para que las piernas de la chica enrollaran su cintura, mientras apretaba el trasero de Natalie con fuerza. La acostó en la cama de al lado y subió su camisa, una se sus manos acariciaba uno de los pecho de Natalie mientras el otro seguía apretando su trasero.Joey... Joey los miraba, deseando poder ser Jacob y deseando al menos poder apartar la mirada, pero no podía ser, ni hacer ninguna de las dos.
—Jacob, basta — Pidió Natalie al recuperar la cordura.
— Vamos.. Sé que te encanta esto — Besó su cuello.
—Solo estas celosos, Jacob. Por favor, para. — el chico se separó y la miro.
—Eres mía y lo sabes. No quiero volverte a ver cerca de este — Señaló con la Mirada a Joey.
—Solo vamos, Jacob. — Se paró de la cama y sus labios formaron un «lo siento» hacia Joey. — Adiós, espero que te mej...
— No le hables — La volvió a besar.
—No seas posesivo, Jacob.
—Soy posesivo porque eres mía y te amo— sus ojos estaban más oscuros de lo normal.
—Sal, Jacob. Ya voy — Demandó Natalie.
— Tienes dos minutos, o si no vendré por ti. — Dijo y salió.
—Lo siento, Joseph, me.. Me deje llevar y yo..
—No te disculpes, yo también habría reaccionado así — Un suspiro salió de ambos. —Sé que sentiste lo que yo con nuestro beso.
Natalie no se sentía capaz de responder, no sabía exactamente lo que había sentido con aquel beso.
—Debes cumplir tu promesa y tienes que recuperarte pronto, estaré en contacto con Sophia, o con Bella. — ella intentó irse, pero la débil mano de Joey la detuvo.
—Te amo— Sin pensarlo, una sonrisa se formó en los labios de la chica. Se acerco y le dio un beso en la frente.
—Te odio, Joseph. Espero que te mejores— Él sonrió.
—Yo también te amo, Natalie.
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Apariencias (Instagram) Jacob Sartorius, Joey Birlem, chico misterioso & Tú
FanfictionUna red social capaz de lograr que la vida de una chica cambie completamente. Ella tiene un secreto que no desea revelar, pero su complicado triángulo amoroso la obligará a revelarlo. Su mejor amigo será el único que quedará al final.