Bailemos hasta embriagarnos de sudor. Hasta que mi imaginación se llegue a saciar de tantas flechas que drenan mis venas y no dejan que mis demonios descansen.
¿Algún día el verde de tus ojos revoloteará en el rubor de mi piel?, ¿acaso tu barba rojiza amenazará con chocar en mis labios aún sedientos de amor?
Oh, deja de estrangularme con tanta belleza llena de retoques y falsas sonrisas. Oí que te gusta bailar, ¿porqué no bailamos hasta el cansancio, cuando mis penas futuras desaparezcan apenas hunda mi cabeza en tu cuello, absorviendo el olor de tu perfume?
Bailemos hasta que tu mano no pueda parar de descansar en mi cintura y se aferre a ella como la luna y la noche se aferran en mi ventana hasta los últimos segundos de un amenecer. Bailemos hasta que quieras comer mis labios a besos. Bailemos.
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Poemas dolorosos
PoetryHe aquí las crónicas rutinarias de mi sufrimiento mental. Sí algún poema te gustó, hazmelo saber.